Kia XCeed. Sumando… posibilidades
La vista zaguera, con el difusor en color carrocería y los estilizados pilotos, está en consonancia con la filosofía deportiva del modelo. KXC
J. F. Z.
Argumentos… comerciales. Convertido en uno de los pilares de Kia en el mercado español —16% de matriculaciones— el crossover compacto del fabricante coreano renueva su propuesta con un atrevido diseño, un interior mejorado, un eficaz abanico motorístico y la llegada de la versión GT-Line.
El frontal se convierte en la zona más característica del nuevo XCeed: actualizada parrilla, distintivo paragolpes y un innovador diseño en las tomas de aire. Las también nuevas llantas (16 o 18 pulgadas, según versiones) contribuyen al renovado aspecto del modelo, mientras en la zaga se adopta un difusor rematado en negro brillante y unas enmascaradas salidas de escape.
La versión GT-Line viene identificada por una parrilla diferente a la de sus demás hermanos de gama: entradas de aire marcadamente deportivas, inserciones de cromo y carcasas de los retrovisores exteriores en negro; a la vez, la trasera incluye un renovado diseño para los secuenciales grupos ópticos.
En el habitáculo, la renovación se centra, calidad de materiales incluida, en una pantalla central (12,3 pulgadas) con innovadoras personalizaciones y, en el GT-Line, un volante de tres radios ya aro grueso —deportividad en sus manos— tapizado en piel, como la palanca de cambios y los asientos de marcado diseño deportivo. Las abatibles plazas traseras (40:20:40), el portón de accionamiento eléctrico con ajuste de altura y el piso del maletero en dos niveles (entre 426 y 1.378 litros) redondean la versatilidad de un modelo que mide 4,39 metros de largo (85 milímetros más que un Ceed de 5 puertas y 120 milímetros menos que un Sportage).
Sin renunciar a ninguna alternativa, el nuevo XCeed apuesta por un amplio abanico motorístico: gasolina, diésel, híbridos ligeros e híbridos enchufables.
En gasolina, se proponen tres versiones turboalimentadas y con inyección directa: el tricilíndrico 1.0 T-GDi de 120 CV (172 Nm); el tetracilindrico Mild Hybrid 1.5 T-GDi de 160 CV (253 Nm); en el techo de gama, el ‘musculado’ tetracilíndrico 1.6 T-GDi de 204 CV (265 Nm), ‘vestido’ en GT-Line, que acelera de cero a cien en 7,5 segundos.
Para los más ‘kilometreros’, el tetracilíndrico turbodiesel Mild Hybrid de 1.6 litros y 136 CV (280 Nm) unido al cambio manual de 6 velocidades; la versión de 32,7 metros/kilo de par, se une al cambio de doble embrague y 7 marchas.
También se propone una versión híbrida enchufable (PHEV), con batería de iones de litio y polímero (8,9 kWh) y motor eléctrico (44,5 kW) combinado con el gasolina tetracilíndrico GDI de 1.6 litros con 141 CV totales (265 Nm); tracción delantera y cambio de doble embrague y 6 velocidades (6DCT), que anuncia 48 kilómetros de autonomía exclusivamente eléctrica.
El sistema ‘Drive Mode Select’, permite al conductor personalizar la dureza de la dirección, las respuesta del pedal del acelerador y, en el caso de las versiones que montan caja de cambios de doble embrague, la respuesta del propio cambio de marchas; puede elegirse entre «Eco», «Normal» y «Sport», este último optimiza especialmente la respuesta de aceleración, una dureza adicional de la dirección —más directa y precisa— y, en general, un comportamiento más deportivo del coche. Como fácilmente puede colegirse, el modo «Normal» prioriza la confortabilidad de uso, mientras el modo «Eco» permite reducir el trabajo del motor adaptándolo a una mayor eficacia en el gasto de combustible.
En el capítulo de ayudas a la conducción, el nuevo XCeed adopta elementos como el control de crucero inteligente combinado con el sistema de navegación y con capacidad para predecir las diversas circunstancias del tránsito rodado —proximidad de una curva, por ejemplo—; detección de ángulo muerto conjuntamente con la alerta de colisión; detección de fatiga del conductor; asistencia de previsión de colisión en las salidas de los estacionamientos, con sensores en el paragolpes zaguero y una cámara posterior, que alertan —los sensores— si otro vehículo se aproxima lateralmente a izquierda y derecha de nuestro vehículo.
También se adoptan otros dispositivos actualmente más ‘convencionales’, como la asistencia de frenada de emergencia —colisión frontal— con reconocimiento de peatones, el reconocimiento de los límites de velocidad, el asistente de mantenimiento y seguimiento de carril y el asistente dinámico para luces de carretera.
Como en todos los Kia que se venden en Europa, el nuevo XCeed equipa de serie el sistema de gestión de la estabilidad del vehículo, que mejora la direccionalidad al frenar y tomar las curvas detectando, mediante la intervención del control electrónico de estabilidad (ESC), la posible pérdida de adherencia.
En suma, que con la deportividad de la variante GT-Line y las diversas innovaciones tecnológicas, el nuevo XCeed eleva el listón de las posibilidades de un modelo que, muy en la línea filosófica de la marca, dispone de 7 años de garantía o 150.000 kilómetros.