el hombre que viste al lujo

Peter Marino tuvo la fortuna de cruzarse en el camino de Andy Warhol a finales de la década de los 70, cuando acababa de abrir su propio estudio de diseño. El maestro del pop art escogió al joven arquitecto neoyorkino para redecorar su casa de la exclusiva zona del Upper East Side. Él fue su primer cliente y quien le abrió las puertas de un mundo inaccesible para un chico de Queens. Luego vendrían Yves Saint Laurent, la familia Agnelli o la de los Wertheimer, dueños de Chanel y responsables de que Marino sea un revolucionario del concepto de tiendas de lujo.

Este neoyorkino con aspecto de motero (viste de cuero negro y adora su Harley Davidson) comenzó su andadura como gurú de las tiendas de lujo transformando el clásico edificio de los almacenes Barney’s de Manhattan en una tienda llena de elegancia y sobriedad que se mantiene a día de hoy. «Estoy orgulloso de haber conseguido atmósferas que no pasan de moda. Es muy fácil caer en la trampa de lo trendy», reconoce el arquitecto.

Otros sellos de Marino

El de Barney’s no es el único proyecto que lleva el sello Marino en la Gran Manzana de Nueva York. La casa de moda Armani se hizo con servicios en 1988 para remodelar su boutique de la Avenida Madison, Ermenegildo Zegna le contrató en el 2006 para rediseñar su tienda de la Quinta Avenida, lugar donde regresó para hacer lo propio con el establecimiento de la firma de marroquinería Louis Vuitton.

Bernard Arnault es uno de sus mayores clientes. El dueño del grupo empresarial LVMH que aglutina las firmas más lujosas, entre ellas Louis Vuitton, se enamoró de su talento y también le encargó la restauración de la sede de Dior en la avenida Montaigne de París.

Sin embargo, la joya de la obra de Marino es la tienda que creó para la firma francesa Chanel en la ciudad de Tokio en el 2006. Una torre de diez pisos que además de los tres niveles destinados a la boutique, cuenta con un salón de exhibiciones y conciertos, oficinas y restaurantes. Además, 700.000 luces LED convierten la parte exterior del edificio en una pantalla gigante de video. Toda una construcción de ensueño. Miles y miles metros cuadrados llenos de luz y de gusto por el lujo, aunque cada una de ellas refleja su propio estilo, pues Marino se centra en crear ambientes únicos y eternos fieles a la historia de la marca.

Hoy en día Peter Marino es el arquitecto que más tiendas de lujo ha diseñado alrededor del mundo: París, Nueva York, Hong Kong, Tokio, Milán, Sidney. Las grandes capitales del diseño disfrutan de una de las obras de este arquitecto neoyorkino, reconocido como uno de los hombres más influyentes por la revista New York Magazine por su contribución en la industria de la moda.