Diario de León

sector textil

España, sin rumbo por la competencia China

LAS IMPORTACIONES DE PRODUCTOS DEL GIGANTE ASIÁTICO DESTRUYERON 4.647 EMPRESAS ESPAÑOLAS EN UN LUSTRO. SU SUPERVIVENCIA HOY SE VE AMENAZADA

Publicado por
césar calvar
León

Creado:

Actualizado:

El sector textil, otro impulsor principal del desarrollo de los países industrializados, vive una etapa tempestuosa que amenaza su propia supervivencia. Los continuos altibajos en la producción, en las exportaciones, en las cifras de negocios y precios hacen muy difícil predecir cuál será su evolución en un contexto marcado por la feroz competencia de China, que en España se ha llevado por delante miles de compañías, y la búsqueda de nuevos centros donde producir más barato.

La globalización de la economía y la liberalización del comercio han permitido a muchas empresas textiles deslocalizar su producción para abaratar costes, pero también han propiciado la entrada masiva de producto extranjero, lo que ha estancado las exportaciones y disparado el déficit comercial del sector.

Según un análisis de esta industria elaborado por la compañía textil Velilla, en la última década los productos de moda procedentes de China han multiplicado por seis su peso en las importaciones españolas. Las compañías del gigante asiático han arrinconado al fabricante nacional porque sus costes de producción son menores y las prendas fabricadas parecidas a las elaboradas en España, siempre que se sometan a los debidos controles de calidad.

El estudio señala asimismo que en sólo un lustro, entre el año 2004 y el 2009, el 30 por ciento del sector textil español desapareció a causa de las importaciones chinas, un porcentaje que equivale a la destrucción de 4.647 empresas. Por supuesto, dentro de ese sombrío panorama hay notables excepciones e historias de éxito como la del gigante Inditex, que puede presumir de haber logrado un beneficio neto de 1.302 millones de euros entre enero y octubre del año 2011 (un 10 por ciento más que en el mismo período del 2010). Eso sí, a costa de llevar la producción al extranjero, de abrir nuevas tiendas de la conocida cadena textil Zara en mercados vírgenes como son los de Australia, Taiwan, Sudáfrica y Azerbaiyán y de poner en marcha iniciativas ambiciosas. Así es el caso de su nueva división y segmentación de comercio por Internet. La ampliación de su comercio a la gran Red abrirá su mercado de forma inimaginable.

Altibajos

Para los supervivientes que no son tan grandes como Inditex, el 2011 fue un año convulso y marcado por los continuos altibajos. Las exportaciones de textil registraron fuertes caídas en marzo, julio y septiembre (en este último mes el descenso llegó al 12 por ciento), pero también vertiginosos aumentos como el de octubre (53,5 por ciento).

Al cierre del 2011 el saldo exterior fue negativo para las empresas españolas: las exportaciones crecieron un 11,6 por ciento y sumaron 9.838 millones de euros. Las importaciones avanzaron un 9,9 por ciento, hasta 15.331,6 millones, según informaba el Ministerio de Economía. La producción del sector registró varios cambios de tendencia, como la subida del 8,5 por ciento de enero y el batacazo del 11,2 por ciento de junio.

La cifra de negocios también sufrió esos vaivenes. Destaca el incremento del 20 por ciento que registró en enero y el descenso del 10,7 por ciento de octubre. Los mismos altibajos muestran los precios. En el primer semestre del año los productos de moda se encarecieron un 0,5 por ciento, muy por debajo de la tasa de inflación general del período (en torno al 3,5 por ciento). De julio a septiembre bajaron, después volvieron a subir y en diciembre cayeron un 1,4 por ciento. Al cierre del año los precios del vestido y calzado habían bajado respecto del 2010 un 0,014 por ciento, imperceptible para los consumidores.

Los datos del IPC reflejaron en enero del 2012, por el contrario, un descenso mensual del 14,4 por ciento fruto de la agresiva campaña invernal de rebajas. La explicación a todos esos vaivenes, explica Velilla en su informe, hay que buscarla en el precio del algodón. La primavera pasada este material marcó máximos históricos al alcanzar los 2,5 dólares (1,95 euros) por libra (unidad de peso equivalente a 0,453 kilos) para bajar en los meses siguientes. Las empresas del sector asisten atónitas a esa volatilidad, que desconocían en un producto como el algodón.

El porvenir inmediato se presenta complicado para las empresas. Hace una década la fórmula del éxito era diseñar en casa y producir en China, India o Bangladesh. Ahora, a la incertidumbre en el mercado de materias primas se une el alza de costes en esos países y la difícil situación económica. La actividad cayó en el cuarto trimestre del 2011 en España y el Gobierno reconoce que la recesión ya está aquí. Eso mantendrá en niveles bajos el consumo del los hogares, lo que perjudicará a las ventas de textil.

tracking