Terroristas en el vientre materno

Hay que inculcar a nuestros hijos la yihad desde su más temprana edad, desde su nacimiento, esta educación comienza en el estado fetal». Este dramático llamamiento apareció en la página web islamista Al Jansaa, fundada entre otros por el ex jefe de Al Qaida en Arabia Abdelaziz al Muqrin, que fue abatido por la policía en junio. Internet se ha convertido en un arma fundamental en la siniestra estrategia de la organización dirigida por Osama Bin Laden y su constelación de fanáticos seguidores. A través de la red, recluta terroristas, disemina su propaganda, recauda fondos, envía mensajes encriptados a sus militantes dándoles órdenes para futuras acciones y enseña a tomar rehenes, fabricar bombas y cometer atentados. Así, se ha difundido un video en el que se explica con todo detalle cómo utilizar un teléfono móvil para hacer estallar un explosivo, un método puesto en práctica el 11-M en Madrid. La última moda, iniciada con el asesinato del periodista Daniel Pearl en Pakistán, es emitir las macabras imágenes de las decapitaciones de extranjeros en Irak para sembrar el miedo. Próximas generaciones Lo que queda claro tras leer Al Jansaa es que los terroristas que representan el mayor desafío a la seguridad mundial en el siglo XXI quieren que la guerra santa la continúen las próximas generaciones. Por eso, instan a las madres a que «eduquen» en la yihad a sus vástagos desde que están en sus vientres. «Nuestra principal misión: empujar a nuestros niños a los campos de batalla, siguiendo el ejemplo de Al Jansaa», decreta Um Raad al Tamini en este sitio de Internet dedicado a los mártires de Al Qaida en Arabia Saudí. Al Jansaa fue una poetisa árabe del siglo VII célebre por haber exhortado a sus cuatro hijos a participar en la yihad para propagar la religión islámica. También se recuerdan sus versos de lamento por la muerte de su hermano Saqr en un combate. «Nos levantaremos veladas» «Cerremos filas al lado de nuestros hombres», se lee en esta revista on-line , que no oculta su ideología, pues emplea una frase de Bin Laden: «Echad a los infieles de la península de los árabes», en referencia a Arabia Saudí. «Nos levantaremos, veladas y en abaya (ropa tradicional), las armas en la mano, acompañadas de nuestros hijos y el Libro de Alá (el Corán) y la Sunna (tradición del profeta Mahoma) nos guiarán. La sangre de nuestros esposos y los cadáveres de nuestros niños serán una ofrenda a Dios», añade. Una de las secciones de la revista se llama Nuestros hermanos, en memoria de los mártires. En ella se escribe lo siguiente: «Los tiranos (los dirigentes saudíes) nos han ofrecido el regalo más precioso al matar a nuestros hermanos. Ardemos de impaciencia por derramar su sangre». Gabriel Weimann, investigador del United States Institute of Peace, señala que una investigación en la que ha participado mostró que en el periodo 2003-2004 los terroristas se sirvieron de cientos de sitios de Internet para sus fines. El también profesor de Comunicación de la Universidad de Haifa señala que por medio de este medio de comunicación sin censura libran una trascendental «guerra psicológica» y logran una publicidad que antes de que se popularizara era mucho más difícil de alcanzar. Por ejemplo, difundiendo amenazas de inminentes ataques a gran escala contra EE.UU., lo que crea una sensación de pánico de la que se benefician.