Diario de León

Citroën C5 Airscape, avance de temporada

Citroën avanza, con el «concept» Airscape, lo que podrían ser las líneas maestras del futuro C5 cuyo lanzamiento está previsto para el próximo año 2008. Marcada estética e innovaciones técnicas, un avanzado control de tracción y motor V6 HDi (2

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JAVIER FERNÁNDEZ | texto
León

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Carrocería descapotable y novedosas aplicaciones técnicas. El concept C5 Airscape, que Citroën presentará esta próxima semana en el Salón de Francfort, resulta ser toda una declaración de intenciones para el fabricante del chevron : preciosista carrocería descapotable, aderezada con un espectacular frontal y, en el plano tecnológico, la adopción de un innovador sistema de control de tracción (motricidad similar al de un vehículo con tracción integral) y la mecánica diesel biturbo V6 HDi de 2.7 litros (208 CV). Con estos mimbres, Citroën avanza lo que serán las líneas maestras de la futura nueva gama C5, que se lanzará el próximo año 2008, con la intención de «subir un peldaño» en la propuesta del modelo medio-alto del fabricante galo. En su frontal, el estudio estético del C5 Airscape recuerda al del C4 y la zaga, con dos salidas de escape, viene a conservar el inconfundible sello de la marca. Las manillas de las puertas encastradas en la carrocería ponen de manifiesto el cuidado estilístico que ha tenido Citroën en la realización del concept . Se trata de un descapotable con capacidad para cuatro plazas del que no puede afirmarse taxativamente que vaya a pasar a la cadena de montaje, aunque sí que adelanta toda una «declaración de intenciones» en los planes del fabricante. Incluso se avanzan innovadoras aplicaciones técnicos-prácticas en una inédita capota realizada en fibra de carbono, acristalada en su parte superior, y con un forro exterior de material textil capaz de ofrecer el aspecto de la tradicional capota de lona y con una cinemática más sencilla y rápida de lo habitual: se quita automáticamente, sin manipulación especial alguna y sin necesidad de abrir la parte superior del compartimento en el que se aloja, situado en la zona del maletero. Completamente tapizado en cuero oscuro y con especial protagonismo de los detalles cromados, el interiorismo del C5 Airscape adopta un volante de núcleo central fijo (está visto que el C4 ha creado escuela) donde se alojan los mandos de navegación, ordenador, sistema de audio y regulador/limitador de velocidad. Además de una sofisticada suspensión hidroneumática -como no podía ser menos en Citroën- también el estudio aerodinámico se ha cuidado especialmente en un coche que presenta un parabrisas muy inclinado, que casi forma plano con un capó que adopta, como el C6, un sistema de protección de peatones en caso de atropello y que, eso también, esconde una de las últimas joyas de la corona de PSA: el V6 diesel biturbo, multiválvulas de rampa común y con filtro de partículas FAP, que cubica 2.7 litros, rinde 208 CV y entrega un par rayano en los 45 metros/kilo, lo que lo convierte -convertirá, se supone- en una de las exclusividades motorísticas de la nueva gama C5. Como también lo son, en el capítulo de exclusividades, el avanzado sistema Star&Stop y el control de tracción Snow Motion. En el primer caso se trata de un sistema que el fabricante anuncia como «UrbanHybrid», capaz de reducir la sonoridad del motor y de optimizar su consumo, dado que apaga el motor cuando se pisa el pedal del freno y la velocidad del coche es inferior a 6 por hora, y no vuelve a arrancarlo hasta que se levanta el pie del pedal del freno. Así, durante el apagado del motor no hay -lógicamente- consumo de carburante ni tampoco se expulsan emisiones contaminantes, de forma que Citroën mantiene que la reducción de emisiones de CO2 es del orden de 24 gramos -más que significativa-. Además, el conjunto del circuito de a bordo (climatización, radio...) sigue estando alimentado gracias a la recuperación de energía durante las fases de desaceleración y frenado, lo que genera economías suplementarias en los citados apartados de consumo y emisiones contaminantes. También se estrena en el concept C5 Airscape un innovador control de tracción Snow Motion, de comportamiento semejante al que tendría un coche dotado de tracción a las cuatro ruedas, con lo que ello trae aparejado de optimización del comportamiento del coche sobre superficies especialmente deslizantes (nieve, hielo...) siempre, claro está, que se monten neumáticos de invierno. La alerta de cambio de carril y los faros direccionales también están presentes en el prototipo C5 Airscape.

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