La eliminación de la trinchera y la plaza de Juan de Austria avanzan
El primer punto crítico de las obras avanza a buen ritmo. El entorno de Juan de Austria ya dibuja el futuro aspecto de reurbanización que tendrá la plaza, que pasará todo el espacio peatonal hacia el lado izquierdo y dejará una única calzada con un carril en cada dirección, en el lateral de la iglesia de Las Ventas. La restricción de cruce para los vehículos desde San Mamés a Mariano Andrés se convertirá a mediados en extensivo para todos los vehículos, dado que se demolerá el puente que permite la comunicación rodada y peatonal.
La actuación de las máquina ya ha servido para presentar el terreno en el que se construirá la rotonda de distribución de tráficos, justo en la esquina que forman las calles Padre Risco y Maestro Jusquín, gracias a la ocupación de un solar. Un planeamiento que sirve de avance para ver cómo se resolverá el cruce entre las dos zonas, que ahora se produce a dos alturas y después pasará a estar al mismo nivel, lo que obligará a colocar un semáforo de paso para las circulaciones ferroviarias del tren tram.
Esta celeridad en las labores de ejecución del proyecto es más visible todavía cuando se encara la traza, desde el puente de Juan de Austria en dirección a la estación. La eliminación de la trinchera ya encuentra sobre el terreno los soportes de hormigón sobre los que irá la losa que ayudará a salvar los más de dos metros de diferencia de cotas que hay entre el espacio de los raíles y las calles. La urbanización de todo este corredor ganará espacio en las próximas semanas y permitirá crear las primeras comunicaciones entre las calles que antes se asomaban a la vía sin posibilidad de unirse. Un total de 14 conexiones, de las cuales una decena serán sólo para los peatones, mientras que el resto simultaneará el tránsito de personas con los vehículos.
La sutura urbana que mantiene condicionada la vida de casi una cuarta parte de la población de la capital leonesa desde hace casi un siglo.