Ferraz da por desactivado el último conflicto del PSOE en Andalucía
El PSOE dio ayer por desactivado el último gran conflicto de los socialistas andaluces con retoques en las candidaturas de Sevilla y Cádiz para los próximos comicios. Los cambios, perfilados en la comisión regional de listas, equilibran supuestamente la representación de ‘griñanistas’ y críticos en ambas provincias. Pero en Ferraz nadie baja la guardia.
Los ánimos en la federación andaluza están tan enconados que es preciso andar con pies de plomo para evitar nuevas refriegas que mermen aún más las posibilidades de éxito en las urnas. En todo caso, la decisión de los responsables de la ejecutiva federal es clara: hasta el 25 de marzo, José Antonio Griñán es el candidato y hay que «primar» el acuerdo con su gente.
Válida. Con ese espíritu, se llegó a una solución de compromiso que permitirá dar por válida la candidatura aprobada el domingo por sólo 79 de los 214 miembros del comité provincial de Sevilla, tras dimitir su secretario general, José Antonio Viera, enfrentado con Griñán y su número dos Susana Díaz. A cambio, Alfonso Rodríguez de Celis, relegado a un puesto de dudosa elección, asciende al número siete, lo que le aseguraría un escaño.
Los críticos tuvieron que prescindir a su vez de Carmen Tovar y en su lugar, en el sexto puesto de la lista, entra la consejera de Hacienda Carmen Martínez Aguayo. Pero lo que realmente estuvo reñido fue la lista de Cádiz. Hasta última hora de la tarde, la secretaria de Organización andaluza, bestia negra para los ‘chavistas’, no pudo anunciar un pacto.