«Quieren conseguir con la violencia lo que no consiguieron con los votos»
El PP ve a la «izquierda violenta» tras los escraches en las casas de sus dirigentes.
Policías protegen la casa de Soraya Saénz de Santamaría de un escrache.
No son ciudadanos comunes indignados con los desahucios quienes, a juicio del PP, se han manifiestado frente a las casas de dirigentes de su partido en los últimos días. El vicesecretario general de Organización de la formación gubernamental, Carlos Floriano, aseguró ayer que las protestas son achacables a la izquierda, una izquierda dijo «violenta y antidemocrática» que pretende conseguir de esa forma «lo que no consiguió con los votos».
Un día después de que unas 200 personas se manifestaran frente al domicilio de Soraya Sáenz de Santamaría con el propósito de exigir un cambio en la Ley Hipotecaria y señalar a la vicepresidenta del Gobierno como «cómplice de la dictadura financiera», Floriano argumentó que la preocupación de quien actúa de esa manera no son ni los desalojos ni los deshauciados. E insistió en que sólo buscan derribar al Ejecutivo.
En ese escrache participó Jorge Verstrynge, el ex secretario general de la antigua Alianza Popular.
«No vamos a permitir que nos empujen —dijo Floriano ayer— porque tenemos la fuerza de las urnas, de la democracia y de casi once millones de españoles que defienden el proyecto del PP».
Floriano calificó los desahucios como un problema «dramático», que hay tres maneras de afrontar, como el PSOE «sin hacer nada», como lo hace el PP «buscando el consenso y con legislación» o «como lo hace esa izquierda violenta y antidemocrática a la que le importa muy poco o nada los desahuciados».
«Cercan nuestras casas al grito de «asesinos» para intentar doblegar nuestra voluntad pero no saben que lo que están intentando es doblegar la voluntad de los ciudadanos españoles que mayoritariamente nos apoyaron», aseveró la mano derecha de Cospedal.
En un acto junto a los militantes de su partido en Cáceres, el dirigente popular defendió además que el Ejecutivo de Mariano Rajoy está dispuesto a promulgar una legislación que hará que los deudores hipotecarios españoles «sean los más protegidos de toda la Unión Europea».
Lo que no harán
La futura Ley de Protección de Deudores Hipotecario y de Alquiler Social, el nombre que la fuerza mayoritaria en el Congreso ha decidido dar a la norma, no contemplará la dación en pago, como pedían desde la plataforma de afectados. El Ejecutivo siempre ha defendido que de hacerlo, dificultaría el acceso al crédito de futuros usuarios. Sin embargo, el texto reducirá la carga de los intereses en caso de impago y contempla quitas con carácter retroactivo.
El texto que los populares hicieron llegar el viernes al resto de los grupos parlamentario —después de varias vueltas de tuerca con las que se ha pretendido dar respuesta a la enorme presión social que ha generado este asunto— tampoco recoge demandas como la paralización total de los desahucios o el ofrecimiento de viviendas de alquiler social para aquellos que sean desposeídos de su hogar.