Una peña motera, una asociación de yoga y para Lorca, que devolvió el segundo del Niño

La diosa fortuna tuvo un día ajetreado viajando por múltiples localidades de España. Pero en esta ocasión, además, decidió llevar la buena nueva de un cuarto premio a Valencia sobre dos ruedas. Y es que uno de los agraciados del 79800 dotado con 200.000 euros a la serie, fueron los miembros de una peña de moteros de BMW Foro800. El 79800 también fue a La Rinconada (Sevilla), Sort (Lleida), Bilbao, Zamora, Oviedo, Arévalo (Ávila), Madrid, Valencia Barcelona, Quesada (Jaén) o La Seu D’Urgell (Lledia).

Algo más madrugador fue el 67065, el primero de los cuartos premios en salir del bombo, cantado a las 10.28 horas por Alejandra Alves y Adrián Castro. El premio también muy repartido fue vendido en administraciones de La Roda (Albacete), Madrid, Boñar (León), Aranda del Duero (Burgos), Peligros (Granada), Oviedo, Lorca, Cuenca, Almería, Murcia, Estepa (Sevilla) y L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona)

José Luis Serrano, lotero de la administración número 2 de Aranda del Duero se ha enterado de que ha repartido el cuarto premio mientras seguía la retransmisión del sorteo por internet. La administración de lotería de la plaza San Julián de Murcia repartió seis millones de euros de ese número. La mayor parte de esos 30 billetes del 67065 se vendieron a una asociación de yoga de La Alberca, según confesó el lotero.

En Oviedo, la administración número 27 ubicada en el número 1 de la calle Juan Ramón Jiménez, en el barrio de la Argañosa ha vendido 90 series. Con lo que ha repartido 18 millones de euros. Marta Paredes, propietaria de la administración ha asegurado que el premio ha quedado «muy repartido por todo el barrio».

El 67065 llevó la alegría al populoso barrio lorquense de San José, donde se vendieron diez décimos en la administración de lotería de la calle Pérez Casas en el populoso barrio de San José. La propietaria de esta oficina, Isabel Vidal, mostró su emoción y reconoció que los millones vendrán muy bien para los vecinos de Lorca, localidad que todavía sufre las consecuencias del grave terremoto de 2011. Además, Vidal también pudo resarcirse del «percance» que supuso la devolución del segundo premio del sorteo especial del Niño.