El calendario de regreso a las aulas
La Junta plantea que colegios e institutos permanezcan cerrados hasta septiembre
El Gobierno acepta la propuesta de Castilla y León para elaborar un protocolo de seguridad
La elaboración de un protocolo de seguridad para el retorno a las aulas, con criterios homogéneos en todas las comunidades autónomas, y la creación de un grupo de trabajo para planificar el próximo curso (2020/2021) fueron ayer las principales conclusiones que arrojó la Conferencia Sectorial de Educación.
La ministra Isabel Celaá aceptó la propuesta de la consejera de Castilla y León, Rocío Lucas, de articular un protocolo de seguridad en todos los centros docentes. En este sentido, explicó que en la Comunidad el regreso a la educación presencial no parece factible, pero que de acuerdo con la información epidemiológica que ahora se maneja sí será posible que en julio se celebre la Ebau (del 7 al 9) y también los programas de refuerzo educativo.
En este sentido, desde la Administración autonómica apuntaron que barajan no abrir los colegios e institutos hasta septiembre. Una postura similar mantienen la mayoría de autonomías respecto a la reapertura de los centros para alumnos de entre 0 y 6 años a partir del 25 de mayo, como se contempla en la fase 2 de la desescalada.
Calendarios
No obstante, el Ejecutivo central y los consejeros formarán a partir de ahora un grupo de trabajo que tendrá el encargo de cerrar antes de las vacaciones estivales una serie de planes de actuación que orienten a autonomías y centros educativos sobre la forma de organizar el curso y las clases a partir de septiembre, evolucione como evolucione la epidemia. Este trabajo abordará diversos aspectos como la organización escolar adaptada a la pandemia, la programación didáctica de cursos y áreas, la dotación tecnológica y el refuerzo de la competencia digital, y el seguimiento y apoyo de la actividad lectiva a distancia con soluciones concretas para los tres escenarios que se estiman posibles: que el curso comience sin necesidad de mantener la distancia interpersonal, que esta media sea indispensable, e, incluso, que sea preciso volver a suspender las clases presenciales por un rebrote del virus y un confinamiento.
Lo pactado ya adelanta que, en cualquier caso, será preciso reducir los currículos a lo fundamental, para recoger lo no dado este curso. Si las cosas no cambian se bajará igualmente el aforo en las aulas para cumplir con las restricciones.