Los asesinos de Lluch se enfrentan a 54 años de cárcel

Los presuntos etarras José Ignacio Cruchaga, Lierni Armendáriz y Fernando García Jodrá se tendrán que sentar el próximo miércoles en el banquillo de los acusados de la Audiencia Nacional para responder por el asesinato de Ernest Lluch, ex ministro de Sanidad y destacado dirigente del Partido Socialista de Cataluña. La Fiscalía solicita una pena de 54 años de cárcel para cada uno por este crimen, cometido en la noche del 21 de noviembre de 2000. Según el relato de hechos ofrecido por el Ministerio Público, los tres terroristas recibieron órdenes directas de la cúpula de la banda para acabar con la vida de Lluch. Tras seguirle durante varios días para averiguar sus costumbres, decidieron atacarle en el garaje de su casa en la Ciudad Condal. Krutxaga y García Jodrá, detenidos en enero de 2001 por las Fuerzas de Seguridad, abordaron «súbita y repentinamente» al político por el costado derecho. Después, los dos presuntos etarras realizaron dos disparos.