«Quien resiste vencerá» Sadam Huseín (presidente de Irak)

nas de cadáveres de los combatientes iraquíes. El avance hacia el norte sólo es retrasado por la intensa tormenta de arena. Este temporal de polvo podría estar tras la desaparición de dos helicópteros estadounidenses, un Apache y un Black Hawk, según informaron fuentes militares en Nasiriya. Por segunda ocasión desde el comienzo de la guerra, un avión atacó por error posiciones aliadas. Al parece, un F-16 estadounidense bombardeó una batería de misiles, posiblemente antimisiles Patriot, en las inmediaciones de An Najaf. Kilómetros más al sur, la coalición declaró ciudad libre Umm Qasar, lo que deja libre el acceso por mar a Irak. En esta zona del país continuaban ardiendo seis pozos de petróleo, donde actuaban zapadores y especialistas. No ocurría lo mismo en Basora, ciudad declarada «objetivo militar» por la coalición, donde 1,2 millones de personas sobreviven sin energía eléctrica ni agua. Según la cadena de televisión Al Yazira, los aliados han lanzado bombas de racimo sobre Basora, mientras que los combates eran intensos en las inmediaciones del aeropuerto. La 1ª Brigada Blindada, conocida como Las ratas del desierto, bloquearon una columna de blindados que pretendía abandonar la ciudad, mientras que los cuerpos de operaciones especiales han emprendido «acciones selectivas» contra los soldados de Sadam. La intensa tormenta de arena que se abatió ayer sobre Bagdad redujo la visibilidad a cero, aunque no fue ajena a ello la boina de humo negro que desde el sábado se cierne sobre la ciudad. Pese a ello, los bombardeos continuaron. Los bagdadies no recibieron el mensaje del Comando Central Estadounidense de no salir de sus casas, ni circular por las carreteras. Esos avisos de los «invasores» no son transmitidos por la radio y la televisión oficiales. El aviso es muy importante porque se recuerda que «el país entero es una zona de combate». El mensaje de advertencia es fruto de la dura experiencia que han sufrido las tropas angloamericanas al ser atacadas por personas vestidas de civil y que circulaban en vehículos particulares.