Muere un capitán del Ejército del Aire al estrellarse en Badajoz el F-5 que pilotaba

Manuel Rivera Hernández, capitán de la Escuela de Reactores de la Base Aérea de Talavera la Real (Badajoz) murió ayer al estrellarse, por causas desconocidas, el caza táctico F-5 que pilotaba en las proximidades de la población extremeña de Balboa, en una zona cercana a la pista de aterrizaje de la propia base pacense. El militar fallecido tenía 34 años, era natural de Alicante aunque vivía en Badajoz, estaba casado y era padre de dos hijos. El accidente que le costó la vida tuvo lugar a las 11:00 horas de la mañana durante un ensayo para la jornada de puertas abiertas que tendrá lugar el domingo día 11 para conmemorar el 50º aniversario de la base de Talavera la Real. En concreto, el avión F-5 se estrelló cuando el piloto realizaba una maniobra de aterrizaje, según el comandante de la base, Luis Aizpurúa. «Vimos el accidente desde la base. Se disponía a aterrizar. Fue justo dos o tres minutos antes de que aterrizara», explicó el oficial. Piloto experimentado Según esta misma fuente, el capitán Rivera era el piloto más experimentado de la base de Talavera. Tenía a sus espaldas más de 3.000 horas de vuelo con aparatos de la aviación militar española y con el modelo T-38 de la Fuerza Aérea estadounidense, ya que había prestado servicios de instructor en la base americana de Sheppard. El siniestro ha tenido lugar a pocos días de que comiencen los actos del 50 aniversario de la base pacense. Se da la circunstancia de que el propio aparato siniestrado había sido elegido como emblema de los actos que figuraban en el programa de celebraciones: lo habían pintado de un color azul muy vistoso, llevaba el logotipo del 50º aniversario y el emblema de la Escuela de Caza y Combate.