Falta una «línea clara» para la emancipación

La ausencia de una línea clara de intervención para favorecer la emancipación de los jóvenes en los centros de protección de menores de la Junta es una de las conclusiones de la tesina de Ana María García Pastor, de la escuela universitaria de Trabajo Social. En el 80% de los recursos destinados a menores que visitaron -todos, excepto uno, el piso Tragaluz- «no figura como objetivo concreto la preparación de los mismos para su emancipación» y la totalidad de los jóvenes respondieron que no habían recibido formación adecuada para ello. La autora de la investigación sostiene que a los 18 años una persona no está preparada para dar el salto a la vida adulta sin más, entre otras cosas porque son una minoría, el 15%, los jóvenes que trabajan a esa edad y, como norma general, la media de edad de emancipación de los jóvenes españoles es de 26,5 años. Aunque la mayoría de los jóvenes quieren seguir estudiando, su nivel de estudios no supera la enseñanza secundaria obligatoria.