Francia juzga a Einstein, ingeniero electrónico de ETA en los 90

Un tribunal especial antiterrorista de París juzga desde hoy a Iñaki Santesteban Goikoetxea, Einstein , acusado de haber sido durante toda la década de los años 1990 el ingeniero electrónico de ETA hasta su detención en septiembre del 2000. Se supone que le sucedió Tomás Elgorriaga, teórico artífice de bombas como la que explosionó el 30 de diciembre en Barajas, que fue excarcelado durante la tregua de 1998-99, en la era Aznar, mientras su predecesor fabricaba dispositivos para 125 atentados en su taller vascofrancés. Un incendio accidental, provocado probablemente por el contacto de clorato de sodio con grasa de armas, descubrió el 3 de mayo de 1999 el centro de operaciones que Einstein tenía desde hacía una decena de años en una casa de Ciboure. Los bomberos que acudieron a sofocar el fuego encontraron su taller de informática y electrónica así como dos zulos, habilitados hacia 1997 tras tabiques de una librería y del cuarto de baño, donde se originó el siniestro. Arsenal En los escondites se confiscó un enorme arsenal formado por 158 subfusiles, 44 pistolas, 23 fusiles de asalto, un revólver, 54 granadas de fusil, 546 cargadores y 14.500 municiones de diversos calibres. De los subfusiles, 120 eran réplicas artesanas del isarealí Uzi mientras que 38 MAT-49 procedían de un tráfico de armas entre el Reino Unido y Marsella dirigido por mafiosos luxemburgueses. También se halló el prototipo de una bomba flotante, un kilo de cianuro y ampollas de valium, sedante empleado en los secuestros, así como tres morteros Jotake explosionados por el calor. Además había abundante documentación como manuales para la fabricación de artefactos explosivos o revistas internas de ETA. En el taller, que en aquellos tiempos de alto el fuego indefinido funcionaba a pleno rendimiento, se hallaron 25 dispositivos, con un emisor y cinco receptores cada uno, que permitían la detonación a distancia de 125 cargas explosivas. En julio de 1999, Santesteban reinstaló el taller de electrónica de la banda terrorista ETA en el granero de una casa de Guiche, en el interior del País Vasco francés. Fue detenido el 16 de septiembre del 2000 en la localidad fronteriza de Sare donde había vuelto a montar un laboratorio de la muerte en el garaje de una casa de campo.