«Nos llegaban lavadoras de hace treinta años o más con marcas que ya no existen»

Estadísticas económicas aparte sobre el éxito de ventas o de ahorro energético del plan renove de electrodomésticos el día a día ofrece no pocas anécdotas que llaman más la atención. Por ejemplo, qué se hace con los aparatos que se entregan a cambio de una subvención de ochenta euros: son docenas de camiones que acaban en la empresa RMD, polémica ya por su actividad de reciclaje de neumáticos en Villanueva del Carnero, a pocos kilómetros de León capital. O de donde salen los aparatos para el canje o los intentos de picaresca para hacerlos colar y que sean subvencionados. Según el responsable local de Media Markt, Roberto Caño, «no valen trucos del cliente ni estrategias comerciales por nuestra parte para que cuele la picaresca. A los primeros se les da un reguardo de que han entregado tal o cual cosa y no cuela ir a un chatarrero para traer una pieza o media lavadora vieja y el seguimiento o controles lo hace la Junta a través de los centros de reciclaje». Sí es frecuente la entrega de piezas que a las jóvenes dependientas les parecen inverosímiles «como lavadoras de hace treinta años que ya no es que no se fabriquen, sino que han desaparecido hasta las marcas». Se ironiza con que todavía no ha aparecido ningún frigorífico de los que antaño funcionaban con butano, pero tampoco se descartaba cuando se inició el renove . Al final todos los artilugios a renovar acaban en centros de achatarramiento, sin que ninguno se recupere ni siquiera para amantes de las antigüedades, ya sea por falta de funcionalidad o de estética, al contrario de lo que pasa a menudo con el mobiliario casero o los automóviles. No hay estadísticas sobre resultados de programas parecidos en otras provincias o comunidades autónomas, aunque se supone ue no difieren en exceso de las de León. Según Caño, en cada autonomía se han aprovechado las subvenciones estatales para acomodarlas a los mejores momentos del mercado. En el caso de Castilla y León se prefirió sumarla a la campaña de Navidad, con resultados espectaculares, aunque ahora viene la cuesta de marzo.