El terrorismo preocupaba menos hace un mes
Los españoles consideran el paro y la economía los problemas más graves
El barómetro del CIS de enero refleja la desconfianza creciente hacia la política
El mayor problema de España antes de las elecciones del domingo pasado era el paro, según el 43,8% de la población, seguido de la situación económica, según el 39,2%. Así se recoge en el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas correspondiente a enero y hecho público ayer. El estudio recoge también que la política no despierta entusiasmo entre la ciudadanía, es más los primeros sentimientos que inspira son «desconfianza», para el 32,1% de los consultados, e «indiferencia», para el 20%. El sondeo del CIS, cuyo trabajo de campo se hizo entre el 14 y 21 de enero, señala que, después del paro y la economía, el tercer problema del país era el terrorismo, así opinó el 35,1%. Un porcentaje que se modificará en posteriores estudios tras el asesinato a manos de ETA del ex concejal socialista de Mondragón Isaías Carrasco el pasado 7 de marzo. Otros asuntos que inquietaban a la ciudadanía eran la vivienda, para el 29,1%, y la inmigración, 23,7%. El estudio también recoge que la percepción que tenían los ciudadanos de la situación económica era pesimista. El 40,3% dijo que era mala o muy mala, el 41,8% la calificó de regular, y apenas el 16,5% opinó que era buena o muy buena. Algo similar ocurría con la situación económica; el 36,5% señaló aún antes de la campaña electoral y las tensiones inherentes a ella que era mala o muy mala, el 40,6% consideró que era regular, y el 14,7% apuntó que era buena o muy buena. El barómetro indaga asimismo por el interés de los ciudadanos hacia la política y los resultados son significativos. Son más los que nunca hablan de política con sus amigos, el 30,6%, familiares, el 29,5%, y compañeros de trabajo, el 24,1%, que los que lo hacen, entre el 10 y el 14%. La visión de los dirigentes políticos también es negativa. El 70,6% consideró que «esté quien esté en el poder siempre busca sus intereses personales»; el 69,8% opinó que los representantes de los partidos «no se preocupan mucho de lo que piensa la gente»; y el 53,5% cree que «es mejor no meterse en política».