Un sistema de rotación con un máximo de 5 años y posibilidad de 3 prórrogas anuales

Con el mercado de la venta de vivienda aplacado por la crisis, el Ayuntamiento pretende implantar «la cultura del alquiler» en el municipio, como afianzó Francisco Gutiérrez, concejal de Urbanismo, quien describió que la idea se plasma en «un sistema de rotación» en el que se posibilite que las personas beneficiadas «puedan incluso ahorrar» para poder ser un día propietarios. Las condiciones reguladas por el consistorio de la capital leonesa conceden un máximo de 5 años de contrato para las personas beneficiarias, aunque disponen una cláusula en la que se recoge la opción de prorrogar año a año tres anualidades más el vínculo, condicionado a que se mantengan los requisitos por los cuales accedió a la prestación del alquiler protegido en su momento. El concejal del equipo de gobierno motivó la elección de los colectivos. Los menores de 35 años por «sus dificultades para la emancipación», debido a sus primeros contratos; los discapacitados y personas con problemas de accesibilidad, a los que se reserva un mínimo de «2 de cada 30 viviendas», para que «puedan mantener su independencia»; los mayores por «la infradotación de estas estructuras que hay en estos momentos»; y los colectivos en riesgos de exclusión por sus dificultades para integrarse. La inclusión en la lista de beneficiarios de las personas insertas en estos sectores poblacionales está sujeta, además, al cumplimiento de condiciones económicas con base en el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (Iprem): 509,40 euros, equivalente al antiguo salario mínimo interprofesional. Este parámetro, según la normativa estatal y autonómica, establece regímenes diferentes: general, para rentas de menos de 5,5 veces el Iprem; especial, para rentas de menos de 2,5 veces en Iprem, con lo que el precio del alquiler será menor; o la que aplica la Junta como máximo en su programa de vivienda joven, menos de 3,5 veces el Iprem. Estos limitadores se evaluarán en el momento de la concesión de las plazas, que en cada caso tendrán un tratamiento, sin que entren en confrontación con las ayudas del Estado y la comunidad, que podrán sumarse e, incluso, cubrirán el precio total del alquiler fijado por el Ayuntamiento. «Nuestra idea es promover un sistema de rotación para incluir que los ciudadanos entren en la cultura del alquiler e, incluso, puedan ahorrar» FRANCISCO GUTIÉRREZ Concejal de Urbanismo