Naturaleza convertida en arte

La última exposición de esta temporada en Sardón tiene una clara connotación ecologista. En ella, la pintora andaluza Pilar Rodríguez Parada muestra una forma diferente de entender la pintura, olvidando totalmente los pigmentos habituales para construir sus cuadros, solamente, con hojas, flores y texturas robadas al entorno natural. Pilar Rodríguez Parada nació en pleno corazón de la marisma de Doñana y es hija, nieta y biznieta de los guardianes de la finca Las Nuevas, donde pasó su niñez, no ya en estrecho contacto con la naturaleza, sino dentro de ella. Esta singular artista explica que «viviendo en este pequeño lugar de 300.000 hectáreas, donde se cruzan cientos de miles de aves que viven en el Ártico, Escandinavia y el Norte de Europa, con otros cientos de miles que viven en el continente africano, al sur del desierto de Sahara, se adquiere una sensibilidad especial, y una mirada teleobjetivo de la naturaleza, que se escapa a común de los mortales» Una primera visión de las obras de Pilar Rodríguez podría llevar a la confusión, ya que emplea los distintos elementos vegetales con la misma expresión que podrían aportar el óleo, la acuarela o lo acrílicos. Pero en sus cuadros hay otras cosas. «Mis obras están hechas con plantas silvestres recolectadas por mí. Y en ellos no solamente hay flores, sino también hojas, trozos de corteza, semillas, espigas y otras partes de los vegetales, que conservo y mezclo con otros materiales naturales como papel artesanal, madera o elementos marinos». Creación biológica El resultado es verdaderamente sorprendente, «Es la consecuencia -explica la artista andaluza- de una naturaleza reinterpretada, fruto de la filtración y reestructuración de tejidos, de la misma manera que ocurre en la metamorfosis que lleva a una oruga a convertirse en mariposa». Pilar Rodríguez Parada estudió en la ciudad de Sevilla y actualmente vive en la localidad de Sanlúcar de Barrameda, crisol y puerta de entrada de más de cinco siglos de cultura sudamericana, lo que, sin duda, significa también un aporte de originalidad a la obra de tan singular artista. Horario: de 11.00 a 13.00 y de 18.30 a 21.30. La galería está en la calle Juan Madrazo, 25.