Diario de León

Creado:

Actualizado:

La España vacía agoniza, la mediovacía intenta mantenerse a flote (nadando a perrito y esperando que alguien llegue a salvarla con impecable estilo mariposa) y la que se llena está desbordada y padece los efectos absurdos de la superconcentración de seres tan apretujados como adocenados. En este asunto no hay balanza que resista, a no ser que intente nivelarse con palabrería, estudios, proyectos, comparecencias y presupuestos para mirar a ver si..., que de eso hay toneladas. Pero así no hay manera.  

La mayoría se marcha de donde no hay alternativas y se agolpa en el engañoso caladero de las oportunidades prometidas. Nada que reprochar. No es nuevo. Poco que perder, más allá del arraigo, la identidad y la valentía del que no quiere morir, ni de rodillas ni de pie; y todo que ganar en la ilusión y la esperanza de triunfar allá donde van millones de semejantes con los mismos sueños. Donde esperan los tiburones, pero también donde brillan quienes resisten a la marabunta y la ruina que provoca sobrevivir a la sobredemanda de todo tipo de productos y servicios.  

He aquí la España bipolar, nuestro santo León del Abandono (no de todos, nada que ceder a la condescendencia y la opereta de la amenaza suicida). He aquí la realidad de imparable hemorragia poblacional y lamentos. De llamamientos a rescates ajenos y enlutadas plañideras de análisis simplón y corto de miras repetido hasta el hartazgo, mocos sonados con estruendo mientras se alarga el brazo hacia el canapé de la ayuda cortoplacista que endulza el drama sin resolver nada.  

No. La solución no puede venir sólo de otros. No debe llegar sin la implicación de todo el tejido social y económico local. No puede fiarse a instituciones o políticas que, hoy más que nunca, ni siquiera llegan a cortoplacistas. La parálisis y la indolencia son actitudes imperdonables, irresponsables, inaceptables.  

Raíz profundamente leonesa tiene el proyecto que la multinacional HP acaba de presentar, #MoverEspaña, con el que arrastra además el compromiso de grandes empresas internacionales punteras en tecnología para poner en marcha un gran mecanismo social e innovador que revierta una senda de abandono que no se da con tan graves secuelas en otros países. La sociedad, los jóvenes, las ideas, son la base que se siembra para cosechar soluciones. Plantar talento, abonar con conocimiento y financiación y cosechar resultados. Qué mejor esperanza. No ha de venir de fuera. No sin nosotros. De nosotros depende.

tracking