Formato nuevo con incertidumbre
Fechas poco habituales para comenzar una temporada de fútbol en esta categoría, donde adaptarse a los tiempos que corren y saber digerir el nuevo formato competitivo tendrá su premio al final de la primera etapa. Temporada clave para vislumbrar el futuro más cercano, de una Cultural que deja atrás el mal sabor de boca del play off por el ascenso y que debe asimilar con rapidez y eficacia su nuevo papel en esta competición, en la cual hay muy poco margen de error. Se puede estar de acuerdo o no con el formato, pero es el que hay, toca coger el toro por los cuernos desde el primer partido.
Plantilla combinada de jugadores que continúan, con las nuevas incorporaciones en todas las líneas, entrenador a estrenar y competición por fases. Todo una incógnita y un... ¡que pasará! Los partidos de preparación, antigua pretemporada, no han sido aclaratorios para el aficionado, quizá sí para el entrenador y jugadores. Lo cierto es que hoy en tierras gijonesas echa a rodar el balón de forma oficial, y ahí es donde el equipo tiene que dar el do de pecho para conseguir algo positivo. Hablar de rivales en estas circunstancias es simplemente orientativo, aunque los medios digitales sustituyen al antiguo mundo real.
Un llamado filial como el Sporting B es la primera piedra de toque, característico de jugadores jóvenes prometedores con ilusión y con el objetivo de demostrar sus cualidades para subir al primer equipo, o ir hacia otros de igual o superior categoría. Primer partido donde David Cabello debe mostrar el estilo de juego que quiere implantar y que marque una forma definida de cuál va a ser su caminar por la competición. Todo es una incertidumbre que nadie sabe como despejar, y solo a través de cada jornada, con los resultados se irá viendo el discurrir de cada equipo.
Van Gaal fue el precursor, “siempre negativo y nunca positivo”, por eso en los tiempos que nos toca vivir cualquier buena noticia tiene un gran peso, hoy se necesita una. Gijón primera estación.