Editorial | Miedo al arrastre de un posible caso Diez

La sucesión de episodios tras desvelarse que el alcalde de León acudió junto a su esposa al Mundial de Catar, en un viaje pagado por Aspire, genera una curiosa situación. Parece que le ha dado la razón en su permanente argumento de que de Valladolid no viene nada bueno. Allí, en la cúpula autonómica del Partido Popular ha surgido el primer pronunciamiento sobre el posible delito cometido por José Antonio Diez. «Cohecho», al ser «un dirigente político que ha aceptado prebendas de un empresario», asegura su portavoz en las Cortes. La situación no deja de ser peculiar, ante la exquisita prudencia —o quizá cobardía— mostrada en León en todos los frentes, incluidos los compañeros de Raúl de la Hoz. Pero más llamativa es la postura del jefe máximo del PSOE en la autonomía. Luis Tudanca suspendió ayer una comparecencia ante la prensa en León. Parece que no se atreve a defender a su alcalde Diez. Mientras, en la calle se palpa la indignación. Especialmente en los que no llegan a fin de mes o no van de vacaciones para pagar la luz o la hipoteca...