Editorial | La paradoja de mimar una tragedia ecológica

Las Médulas fueron una terrible agresión al medio ambiente buscando oro, hasta el punto de borrar del mapa literalmente buena parte de una montaña. De aquel operativo inmenso surgió un paraje de singular valor en lo arqueológico, en lo patrimonial y en lo natural. Pero, por sus singularidades, tiene problemas estructurales para su conservación. Un buen ejemplo es lo ocurrido en la cueva La Encantada, a la que hace mucho tiempo se le derrumbó el techo, generando si cabe un espacio más singular.

Ahora, dentro de ese nuevo tiempo que se pretende abrir en Las Médulas —con una mayor implicación y colaboración de las instituciones—, la Consejería de Cultura de la Junta promueve un proyecto de investigación digital en este espacio cultural a partir de diferentes fases de escaneado láser de alta precisión para determinar la degradación del paraje y sus taludes.