Casa Fernández Llamazares

Manuel de Cárdenas y Pastor, madrileño, titulado en 1900, ese mismo año accedió al cargo de Arquitecto Municipal de León, tal vez por recomendación de influyentes amigos de su familia, entonces en el Gobierno de la Nación. En marzo de 1902, firmó esta Casa Habitación promovida por los «Sobrinos de Fernández Llamazares» en un solar de la entonces calle Catedral (actual Ancha) c/v a Bayón (hoy Sierra Pambley). Proyectó un sótano parcial para almacenes y servicios. La planta baja para locales comerciales rodeando el portal con su escalera de tres tramos para subir a tres niveles con 6 viviendas distribuidas al modo habitual por un largo pasillo que conecta habitaciones indiferenciadas, las más vivideras a la calle y las demás con las zonas húmedas a patios interiores. Concibió los alzados exteriores simétricos y tripartitos. En la base, discreta portada con tragaluz entre los huecos de las tiendas separados por machones sobre zócalo resaltado, regularmente fajeados, rematados con motivos vegetales y enmarcados por jambas lisas culminadas con ménsulas bajo las plataformas de balcones encadenados por una imposta que da paso al cuerpo noble. Bellos miradores de forja en los laterales flanquean frentes de ladrillo rojizo aparejado a tizón abriendo balcones pareados o sencillos en disposición simétrica: antepechos de hierro moldeado, vanos verticales, carpintería de madera, decoración floral en los dinteles, jambas resaltadas y ménsulas bajo guardapolvos conformando otros balcones. Y culminando la composición, un primoroso alero de obra con geométricos esgrafiados entre refinados modillones… Cárdenas se presentaba en León pletórico de facultades, como un competente y distinguido arquitecto eclecticista, tradicional en la distribución interior de las viviendas, pero trazando fachadas acordes a modelos compositivos propios de la arquitectura doméstica madrileña (ordenación jerarquizada, zócalos de piedra, machones fajeados, muros de ladrillo y revoco, balcones seriados, atractivas cornisas…), herederos de cierto racionalismo constructivo decimonónico, aquí pleno de atributos decorativos Modernistas, Art Nouveau o de la Secesión Vienesa.