Diario de León
Publicado por
JOAQUÍN TOMÁS FORTUNATI CENDRERO
León

Creado:

Actualizado:

Fumar era un placer. He sido un gran fumador, pues desde los quince años, no se pueden imaginar ustedes con cuanta nicotina y alquitrán he estado castigando a mis vías respiratorias. Pero afortunadamente, hace diez años, un buen día se me encendió la bombillita y vi claramente lo absurdo y lo peligroso que era fumar. Creo en los placeres que te da la vida y de la necesidad de aprovecharlos, pero si quieren que les diga la verdad, si consideramos el fumar un placer, hay que descartarlo inmediatamente y prescindir de él, porque no vean la cantidad de problemas que conlleva. No estoy dispuesto a renunciar a ningún otro de los considerados placeres de la vida, pero cada día me alegro más de haber dejado este. No se pueden imaginar lo que es levantarse de la cama sin toser y sin escupir toda la porquería que llevan consigo los cigarrillos. Es verdad que antes, era más fácil dejarlo, porque no le echaban al tabaco ni la mitad de los productos dopantes que le ponen ahora para que enganche mucho más y sea más complicado dejar esta droga, porque que sepan que el tabaco es una de las drogas más duras que hay, que encima está permitida y en cierto modo hasta bien vista por cierta parte de la sociedad, pero si se lo proponen, seguro que dejarán este vicio, que a la larga les resultará caro, ya no tanto en dinero, que también se nota el ahorro, sino sobre todo en la salud. Todavía me acuerdo que en los años setenta y ochenta, todos los presentadores de programas e incluso los invitados que iban a televisión, salían fumando, eso era una costumbre muy bien vista por todo el mundo de entonces, no salía un político sin el cigarro y el plató estaba que echaba humo, nunca mejor dicho. Si nos referimos a la cantidad de enfermedades que podemos desarrollar en todo el sistema respiratorio, evitarán de un plumazo, entre otras muchas, las bronquitis crónicas, los enfisemas pulmonares y el peor de todos, el cáncer de pulmón. Entonces nos daremos cuenta que dejar el tabaco, debería ser la primera cosa que nos propongamos hacer para tener una calidad de vida mucho mejor. Dicen que los que han sido fumadores, son los menos transigentes con la gente que fuma, la verdad es que a mi no me ha pasado todavía esto y tolero bastante bien a mi lado a los fumadores, precisamente durante el desayuno tengo una tertulia con cuatro fumadores, pero esta normativa que va a salir en enero próximo la veo necesaria para proteger en los locales cerrados al resto de las personas. Por lo tanto, animo a todas mis amigas y amigos fumadores a que en breve tiempo se propongan dejar de fumar. Ese será el primer paso de una vida que disfrutarán mucho más y podrán apreciarla mejor en todos los sentidos, se lo dice un ex fumador que consumía dos cajetillas diarias y que tuvo la gran suerte, hace ya algunos años, de eliminar de su vida esta perniciosa droga. Definitivamente, fumar era un placer. Joaquín Tomás Fortunati Cendrero

tracking