La parsimonia de la Diputación con Lancia

Como cada año desde la Diputación nos venden la misma moto con respecto al yacimiento arqueológico de Lancia, diciéndonos las muchísimas cosas que van a hacer, pero los avances en la excavación e investigación son mínimos. Por otro lado, si ya es bastante deleznable utilizar a estudiantes como mano de obra gratuita con la escasa contrapartida de proporcionarles mínimos conocimientos sobre arqueología, las condiciones en las que los tienen son de lo peor, sin un seguro en caso de accidente, sin equipo de seguridad calzado, ropa de trabajo, herramientas adecuadas, sin aseos ni vestuarios, ya que aunque la caseta que hay en el yacimiento tiene servicio, parece que es muy costoso rellenar el depósito de vez en cuando y el espacio es tan reducido que no da para nada, sin medidas de seguridad en la excavación, perfiles de varios metros sin apuntalar, ni vallar, con el peligro de derrumbes y caídas algunas se han producido otros años, por suerte sin consecuencias. Tampoco son mejores las condiciones de los trabajadores "sacados de las filas del paro" según se dice en la noticia publicada en su medio, ya que en las dos campañas anteriores este personal no era contratado, sino en régimen de colaboración social, por lo que no tenían un contrato ni cotización a la seguridad social, únicamente la obligación de presentarse a la oferta y una compensación equivalente a la diferencia entre base de cotización por la que estuvieran cobrando la prestación o el subsidio y la cuantía de estos en algunos casos ridículo, además de poner todo tipo de pegas al abono del transporte hasta el yacimiento, a personas que en algunos casos debían desplazarse hasta 80 km diariamente, ida y vuelta, obligatorio según las bases de la convocatoria aunque con protestas conseguimos que algo se abonase. Eso sí, se nos entregan botas de seguridad y ropa de trabajo. Por otra parte, son comunes los problemas con los permisos de excavación, ya que en las dos campañas citadas anteriormente se han producido parones de varios días en el trabajo de excavación, al parecer por carecer de permiso de la Comisión de Patrimonio de la Junta para la realización de actividades arqueológicas en el yacimiento. Todo ello aderezado con unos recursos mínimos de tan sólo 38.500 € para una labor que debería estar bastante más apoyada por la administración provincial, teniendo en cuenta que el Instituto Leonés de Cultura cuenta con un presupuesto de 4.969.993,73 €, lo que equivale a invertir en la que califican como "la mayor ciudad conocida de los astures" tan sólo un 0,77 , y un 0,02 del presupuesto total de la Diputación, lo cual explica sin duda esa necesidad obligada de la dirección del ILC en escatimar gastos en todo lo posible e incluso en lo imposible.