Monte de San Andrés, herido de muerte

Quisiera denunciar la negligencia demostrada por el ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo, al permitir durante años y años el vertido incontrolado de residuos en las parcelas colindantes a los depósitos de agua, que se encuentran entre las localidades de Ferral y San Andrés, más concretamente en el camino que hay entre la avenida de León y la calle de la cuesta de Ferral. En dichas parcelas carentes de vallado se están acumulando escombros, neumáticos, viejos electrodomésticos, chatarra, bidones de aceites sin precintar, residuos químicos procedentes de fábricas y obras de construcción. Pero lo peor es que todos esos desperdicios se han esparcido a lo largo del camino invadiendo el paraje natural y acercándose peligrosamente a los depósitos de agua. ¿Quien nos asegura que toda esa inmundicia no se filtre mezclándose con el agua potable y termine siendo parte de nuestra dieta diaria? Habría que mencionar también la existencia de un cementerio de neumáticos alojado en lo que era la antigua barrera, a escasos 10 metros del depósito acuífero, hoy en día los miles de neumáticos junto con escombros y demás desperdicios yacen enterrados en silencio, y sólo son perceptibles por una proctuberancia agreste que nada tiene que ver con el paisaje natural, ojos que no ven corazón y salud se resienten según mi opinión, y si no hacemos algo pronto puede que todos paguemos las consecuencias, quizás llevemos tiempo ya pagándolas y aún no somos conscientes. Hago un llamamiento a las autoridades municipales para que endurezcan más si cabe las leyes vigentes en cuanto a vertidos y conservación de nuestro mejor legado para generaciones venideras, el medio ambiente.