Diario de León

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La agresión sufrida ayer por el presidente del Consejo del Bierzo y portavoz socialista en Ponferrada exige la condena total, inmediata y sin ningún tipo de artimaña política por parte de todos. La tensión creciente en las calles, alentada desde hace tiempo por determinados partidos radicales, es el origen claro de este nuevo incidente que ha sufrido Olegario Ramón. La sociedad entera debe señalar con el dedo acusador a todos y cada uno de los intolerantes que son incapaces de vivir en libertad y respetando al resto en una Democracia. Pero también es imprescindible que se condene explícitamente a los que animan a los violentos, a los que realizan condenas con la boca pequeña o incluso buscan argumentos o justificaciones para maquillar acciones como la de ayer en Ponferrada. Tolerancia cero. De todos. Sin ‘letras pequeñas’ ni ‘apaños’.

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