Sobre el aeropuerto de León

En los últimos tiempos ha habido varias y esperanzadoras noticias sobre el aeropuerto de León: nuevas rutas internacionales, aduana, y por fin, un servicio de transporte con la ciudad. Esta última ha tenido que esperar, ni más ni menos, que a la visita del Ministro de Fomento. Y es que unos 10 años después de haberse inaugurado, el aeropuerto de León sigue sin contar con un servicio de transporte a la ciudad que merezca ese nombre. Los concesionarios son los taxis de S. Andrés del Rabanedo y de Valverde de la Virgen, pero una vez más, han elegido como rehenes a los viajeros y les hacen esperar en el aeropuerto un tiempo similar al que necesita el avión para desplazarse desde Barajas a León. Y si no, que se lo pregunten a los pasajeros que, procedentes de Madrid, tuvieron que esperar, el pasado 8 de enero de 2010, más de 40 minutos a que un taxi los llevara a León, soportando las bajas temperaturas que se alcanzaron aquella noche. Por cierto: mi agradecimiento a la patrulla de la Guardia Civil que aquella fría noche se presentó en la parada de taxis, ofreciendo su mediación, y gracias también al señor Cisneros Luaces que, al menos, respondió a la reclamación presentada por el remitente de esta carta en la oficina de Aena. Sin embargo, no puedo sino quejarme, respetuosa pero firmemente, por el hecho de que ni Ayuntamiento de León ni Junta de Castilla y León hayan podido ahorrarme esta carta.