Diario de León

HOJAS DE CHOPO

Una sed que nos devora

Publicado por
ALFONSO GARCÍA
León

Creado:

Actualizado:

La crónica de la España viva parece la crónica de un gigante disparate que produciría risa si el asunto no fuera tan serio. Y, sin embargo, incluso con ciertos ridículos internacionales que ponen en riesgo normas del más puro sentido democrático y nos ponen a todos en solfa, aquí parece haberse instalado la teoría y práctica del no pasa nada y de la impunidad establecida. Parece que quieren hacernos convivir con la indecencia de las conductas de algunos políticos, una de las grandes preocupaciones de los españoles, mientras en un acto de desvergüenza incomprensible las fuerzas del bipartidismo resucitan la idea de la conspiración, pobrecitos, de una sistemática y organizada persecución a sus siglas. Parece un asalto al sentido común. No sé si será o no temporal la crisis del bipartidismo. Los sondeos van en otra dirección. Necesitamos que pase la crisis económica, que pasará; pero, con urgencia, la crisis política. Aquí hay más dudas: hace falta muchísima limpieza.

Al parecer, estas y otras discusiones producen mucha sed, no de justicia precisamente. Y es así como la Administración se ha bebido en botellitas de agua el último año ¡50 millones de euros! Una cifra insultante del descontrol y el despilfarro en que algunos quieren convertir el ejercicio público. Súmense al consumo los 21 nuevos organismos creados este año. Añádase el dato de los 445.568 nombres que en 2011 vivían del momio público, inflado ya a reventar y sin que sirva de fortaleza el argumento de la elección popular, sólo relativa al tratarse de listas cerradas en el mejor de los casos. ¿Cuántos médicos, o profesores, o hambres infantiles, o proyectos de investigación… podrían alentarse si los susodichos bebiesen agua del grifo en jarritas monas refrescadas con hielo? La cifra sale de ojo. La sed incontrolada de unos pocos devora la esperanza de unos muchos, sometidos a los vaivenes de la desesperanza. La racionalización del gasto, el control del dinero público entregado a diversas organizaciones, la dureza ante el mapa de la corrupción que se extiende como la niebla, la supresión de haberse instalado –algunos- en el lujo del Todo Incluido, devolverían en buena medida la fortaleza de un pueblo maravilloso que entiende que nunca como hoy la política ha entrado en la élite del dinero. La vida de lujo asiático de algunos es un insulto. Un insulto social de hondo calado al que la Justicia debe atacar con toda sus fuerzas, sin dependencias. Estamos ante un modelo de sistema político ya agotado. Despreciado incluso.

Algunos, sin embargo, de forma sibilina insisten, como posible justificación, a que el ejercicio de la política está mal pagado. Daría mucho de sí el ejercicio de comprobación y, en algunos casos, provocaría sonoras carcajadas. Es cuestión de poner ejemplos.

tracking