EDITORIAL: El laberinto empresarial de Pucci queda al descubierto ante el juez
Los administradores que tutelan el proceso concursal que gravita sobre Antibióticos desde el 22 de julio de 2013 han redactado 183 folios con más de 60 pruebas documentales para plasmar las conclusiones a las que han llegado después de meses de investigaciones en torno a los movimientos societarios de la farmacéutica, el entramado de empresas de Danielle Pucci y si hay relación entre la insolvencia de la industria leonesa y el presunto desvío de dinero desde la sociedad que la administra hacia otras vinculadas a la familia que ostenta la propiedad de la firma. Los resultados traducidos a papel son devastadores y concluyen la calificación del concurso como «culpable».
Culpable porque, presuntamente, hay numerosas irregularidades relevantes para comprender la situación patrimonial y financiera de Antibióticos, industria señera en León de cuyo futuro dependen hoy 250 familias. También culpable porque se han encontrado conflictos contables, incumplimientos de obligaciones, inexactitudes graves en los documentos que acompañan la solicitud de declaración del concurso, alzamiento de la totalidad o parte de los bienes, salidas fraudulentas de dinero entre empresas vinculadas a la familia Pucci y embargos no declarados, por mencionar sólo algunos de los hechos citados en la documentación que hoy desvela este periódico. El informe final de la Administración Concursal determina que la sociedad creada en su momento para gestionar Antibióticos se ha limitado a actuar como una persona jurídica interpuesta «en la más flagrante vulneración del principio de buena fe y en un ejercicio abusivo del derecho que no puede ni debe ser amparado, pues el único propósito de dicha persona es el de perjudicar a los acreedores sociales». Tan contundente como esta afirmación de los administradores concursales es una prueba relativa a las cuentas anuales de la sociedad que controla Antibióticos, ya que ahora se conoce que carece de medios materiales toda vez que la cifra global de su activo es de cero euros. Los administradores reclaman 5,5 millones de euros a Pucci, a su hija y a varias de sus sociedades por el presunto desvío de dinero; inhabilitación por 15 años para administrar bienes ajenos, y el embargo preventivo de todos sus bienes, incluidos los vehículos Porsche y una extraordinaria yeguada.
Todos los documentos ya han sido puestos en manos del juez de lo Mercantil de León, en quien recae ahora la decisión de continuar con el proceso poniéndolo en conocimiento de la fiscalía, en caso de encontrarlo culpable, o dar carpetazo si cree que el camino de Antibióticos durante los últimos meses responde a una situación fortuita.