Casualidades

Pueden ser casualidades, pero ¿y si no? Parodiando a José Mota, aunque en negativo, a veces ocurren cosas curiosas. Podían haber sucedido en otro momento, pero cuando ocurren tienen su plus de oportunidad.

Así pasa que el AVE llega a León y que para darle la bienvenida como se merece se reducen los precios más del 76% a quien previsoramente haya adquirido los billetes antes del 15 de octubre y para viajar hasta el 30 de noviembre. Hasta el jueves costaba 20 euros el billete a Madrid pero el 16 de octubre su precio fue de 87,4. Claro que esos precios sólo existieron un día, porque al siguiente ya se encargó Renfe de comunicar que ponía a la venta 150.000 plazas hasta fin de año con descuentos de entre el 30 y el 70%, de forma que, por ejemplo, los billetes de ida y vuelta de León a Madrid costarán 54,60 euros en AVE y 49,20 en Alvia. Y si se compran con antelación anuncian plazas a 14,75 euros desde aquí al Foro...

Puede ser casualidad, pero también desde hoy no habrá vuelos desde el aeropuerto de La Virgen del Camino. Es el primer día sin aviones en las pistas de un aeropuerto de andar por casa que se inauguró en 1999 y al que se le quiso homologar con la T4, como si esto fuera Jauja y no León. Ya se dijo cuando se abrió que la jaula era bonita, pero se necesitaban pájaros. Nunca abundaron (queda lejos la época de Lagun Air) pero en los últimos tiempos se ha ido a menos de una manera estrepitosa y así nos luce. Ahora un mes a bus y tren y luego volverá el vuelo a Barcelona, único que se mantiene con cierto éxito hasta el punto de que tal vez la forma de que nuestro aeropuerto sea internacional es si se independiza Cataluña...

Otra casualidad es que el presidente Herrera se tomara a pecho en las pasadas elecciones autonómicas su apoyo a la minería y desde entonces no ha dejado de tener desplantes: del ministro Soria y del propio Rajoy, que en su última visita a León dijo aquello tan gallego de que se incentivaría las alternativas en las cuencas..... O sea que parecía como que iba a apoyar el tema y la realidad era que pretendía enterrarlo. Por eso la casualidad —o no— ha hecho que Juan Vicente Herrera fuera uno de los tres mandamases del PP que no acudió el viernes a Toledo al baño de ilusiones con que el partido intenta empujar a los suyos a salir sin miedo al ruedo electoral de diciembre. La casualidad puede servir para que Herrera se desmarque.No olvidemos que su candidatura en mayo fue casi de compromiso...