Caritas de León: 70 años de historia

D esde 1945, año en que el obispo Almarcha puso la primera piedra de lo que más tarde sería Caritas, hasta nuestros días, han pasado 70 años y un largo y fecundo recorrido de esta institución. Aunque la caridad siempre ha sido una constante en la historia de la Iglesia, la presencia de Cáritas en León, como institución, se remonta a mediados del siglo pasado. En las Navidades de 1945, el Dr. Almarcha, en su Carta Pastoral La Caridad y las obras de caridad, dirigida a la Diócesis, decía: «Alrededor del párroco debe florecer como institución parroquial una organización de caridad para todos los feligreses necesitados. El párroco acoja con paternal caridad a los pobres desvalidos».

Así es como comienzan a funcionar en algunas parroquias de la ciudad las ‘Cajas Parroquiales del Pobre’. Los pasos siguientes son la creación de un fondo económico, en 1946, con la aportación de todas las parroquias y la fundación de la ‘Caja Central del Pobre’, en 1950, para coordinar todas las obras de caridad. La primera actuación de la Caja Central del Pobre fue la colaboración con las llamadas ‘Casas de Aguinaldo’, construidas en el barrio de La Purísima, al norte de la ciudad de León, y destinadas a los inmigrantes que en aquellos años difíciles de postguerra venían del campo a la ciudad. Pero la fecha fundacional de Cáritas hay que retrasarla hasta septiembre de 1957, dentro de la celebración de un Sínodo Diocesano.

En los años 50, Caritas de León comienza su andadura de forma lenta, pero segura, para recorrer una serie de etapas que van de la actividad meramente asistencial a la de concienciación y reivindicación social. La Memoria de 1959 recoge las actividades mantenidas por esta entidad: Fichero de Pobres, Tómbola Diocesana, Ropero Diocesano, Ayuda Social Americana, Medicamentos, etc. Sorprende la gran actividad caritativa mantenida en toda la Diócesis. Por ejemplo, el Fichero de Pobres, exigido para repartir la Ayuda Social Americana, existió en 385 parroquias rurales y en todas las parroquias de la ciudad, que atendieron a más de 1.200 familias y repartieron 95.128 kg. de leche en polvo, 8.015 kg. de queso y 1.202 colchones.

En 1961 Caritas Nacional aprueba su reglamento y pide a todas las diócesis que declaren a la Caritas Diocesana como persona moral con plena personalidad jurídica mediante decreto especial del prelado. El 29 de enero de 1968 el arzobispo de Barcelona, Marcelo González, a instancia de Cáritas Nacional, escribe a Luis Almarcha recordándole la necesidad de conceder a Caritas de León la personalidad jurídica que exige Caritas Nacional. Llega a decirle el arzobispo Marcelo: «Si todas las Caritas se constituyen de este modo, parecería extraño que la de León no quedase así formalizada». Pero Almarcha no contesta. Posteriormente, el 22 de abril de 1968, Ramòn Echarren, en nombre de Caritas Nacional, escribe nuevamente a Almarcha reiterándole el deseo de Cáritas Nacional en estos términos: «Próxima a celebrarse la Asamblea Constituyente de Cáritas Española, me he tomado la libertad de dirigirle esta carta a V.E., rogándole encarecidamente tenga a bien conceder dicha personalidad canónica que, en modo alguno, implica la necesidad de pedir la personalidad civil».

En el Archivo Diocesano no hay constancia de que el obispo de León contestase a la carta de Echarren, pero el 2 de mayo de 1968 Almarcha dirige a Marcelo González un escrito en el que con buenos modales le dice que «Cáritas es una acción eclesial más que una organización», por lo que no cree necesario concederle la personalidad jurídica.

Así las cosas, sin dar el brazo a torcer, una vez jubilado Almarcha, el vicario capitular de la Diócesis de León, «sede vacante», en 1971 reconoce públicamente la labor que viene realizando Cáritas y escribe el siguiente decreto: «Venimos en erigir y por el presente erigimos a Cáritas Diocesana con personalidad jurídica propia, como órgano oficial coordinador de las obras e instituciones de Caridad y Asistencia Social de la Iglesia en la Diócesis de León y como organismo autónomo de Cáritas Española... Dado en León, a 8 de marzo de 1971».

De esta forma, hechas las paces con Caritas Nacional y concedida la personalidad jurídica propia, con la nueva sede en C/ Generalísimo, nº 7, Caritas de León comienza a extender su campo de acción a familias necesitadas, transeúntes, toxicómanos, inmigrantes, a programas de sensibilización social, etc., hasta llegar a nuestros días con los siguientes programas y servicios: «Acogida y Atención Primaria», «Apoyo y Dinamización del Territorio», «Infancia y Ludotecas», «Atención a Inmigrantes y Extranjeros», «Toxicómanos», «Transeúntes», «Caminando Juntos», programa de acompañamiento a personas mayores que viven en residencias geriátricas, «Casa de Acogida e Intervención Socio-Laboral para Mujeres», «Comunicación», para promover un adecuado conocimiento de la institución, «Servicio de Economato», «Formación y Empleo», programa trasversal a todos los demás, «Servicio de Ropero», «Tutela de Permisos Penitenciarios», y finalmente, el «Programa de Voluntariado», que es el que hace posible que todos los servicios que mantiene Caritas de León se puedan realizar gracias a la colaboración y al compromiso gratuito y desinteresado de más de 400 voluntarios, junto con el trabajo de los profesionales.

La acción caritativa de la Iglesia llega a muchos grupos y personas excluidas de nuestra sociedad y puede llegar a más gracias a la colaboración de todos. El centro de atención de Caritas es la persona, a la que ofrece un espacio de acogida, escucha y acompañamiento en su sede social, ubicada en el Edificio Padre Llorente de la calle Sierra Pambley, nº 6 de León.