Diario de León

Aclaración de datos de la historia

Publicado por
Joaquín Cuevas Aller, escritor
León

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Es decepcionante oír o leer a personas, ya sean historiadores, periodistas o políticos, incluso a los de gran prestigio, pronunciarse sobre la Historia medieval de España y comprobar la gran ignorancia de la mayoría de ellos. Veamos el siguiente ejemplo: hace unos días el famoso periodista Federico Jiménez Losantos dijo lo siguiente en su programa de radio Las Mañanas de Federico: «La Corona de León se integró en la Corona de Castilla». La misma persona, hablando del tiempo, dice con frecuencia «lloverá en las dos Castillas, dando a entender que la región leonesa es parte de Castilla.

Frases similares las dicen o escriben la mayoría de los escritores con frecuencia. Lo que me llama la atención es que ninguno de los que así hablan o escriben aporta pruebas o algún documento irrefutable que demuestre la veracidad de tal afirmación. Da la impresión de que más que historiadores son personas obsesionadas con Castilla, como si fuera la única región que reconquistó España cuando la realidad es que Castilla no reconquistó nada ni siquiera su propio territorio que fue reconquistado por los reyes de Oviedo y de León. Parece increíble que una persona como Federico Jiménez, que parece el adalid defensor de la verdad, pueda decir semejantes frases sin antes cerciorarse de que lo que dice es verdad. Él y todos los demás que hablan así parecen discípulos del mayor falsario de la Historia medieval de España: Rodrigo Jiménez de Rada o de alguno de sus innumerables discípulos. Rodrigo Jiménez de Rada escribió en su Historia de España titulada De Rebus Hispaniae que la Reconquista empezó en Castilla en el siglo VIII, dos siglos antes de que existiera Castilla. En su Historia no figuran los reinos de Oviedo y de León, todo era Castilla.

Si los que dicen que la Corona de León se integró en la Corona de Castilla se preocuparan de leer a los cronistas medievales no habrían dicho o escrito semejantes mentiras. Si los que dicen que la Corona de León se integró en la Corona de Castilla leyeran el acta de las Cortes de Castilla celebrada en Burgos el año 1301, no solamente sabrían que la Corona de León no solamente no se integró en Castilla, sino que era imposible su integración porque Castilla se opuso siempre. Que una gran parte de los historiadores, periodistas y políticos mientan cuando escriben o hablan es, por desgracia, muy frecuente, pero que personas cultas como Federico Jiménez diga semejantes mentiras, no soy capaz de entenderlo.

Entre esas personas que dicen o escriben sobre la Historia medieval de España hay una honrosa excepción: el muy famoso historiador Ramón Menéndez Pidal. El Sr. Menéndez Pidal dijo lo siguiente: Castilla surge en la Alta Edad Media como un pueblo de linaje vasco que se enfrentó varias veces a la Monarquía asturleonesa porque no aceptaba la tradición visigoda ni las leyes leonesas del Fuero Juzgo ni los tribunales del Reno de León. Castilla quiere regirse según sus propias costumbres.

Referente a la frase «lloverá en las dos Castillas» debo decir que hay otra mentira, una mentira muy antigua. Nunca hubo dos Castillas, sólo ha habido una única Castilla la que, como decía antes, nació en la Alta Edad Media como un pueblo de linaje vasco. La otra Castilla, antes llamada Castilla la Nueva y ahora Castilla la Mancha nunca ha existido, debe llamarse región de Toledo. La Historia real es la siguiente: el Reino de Toledo fue reconquistado por el Rey de León Alfonso VI el día 25 de mayo del año 1085. El Reino de Toledo quedó anexionado al Reino de León y, según los cronistas medievales, fue repoblado mayoritariamente por asturianos, gallegos y leoneses excepto la actual provincia de Guadalajara que fue repoblada mayoritariamente por castellanos. El año 1143, el Rey de León Alfonso VII, le concedió la independencia a Portugal. El año 1157, poco antes de morir, dividió el Reino de León en tres Reinos independientes entre sí: León, Castilla y Toledo. A Castilla le concedió la independencia pensando que como había sido ungido Emperador de España el año 1135, creyó que León y España era una misma cosa. Y nombró Rey de Toledo al Rey de Castilla con el fin lograr una amistad entre León y Castilla. Castilla había demostrado hasta la saciedad que no soportaba la hegemonía del Reino de León, nunca la aceptó. Alfonso VII no encontró o no supo encontrar la fórmula mágica para que León y Castilla siguiesen juntos bajo la hegemonía de León o, al menos, mantener una unión amistosa. La división del Imperio hecha por Alfonso VII fue un duro golpe a la idea imperial asturleonesa. Que el Rey de Castilla fuera nombrado también Rey de Toledo no significa que el Reino de Toledo se integrara en el Reino de Castilla, algo completamente imposible porque eran muy distintos. El Reino de Toledo se regía por las leyes leonesas del Fuero Juzgo mientras Castilla nunca tuvo leyes, se regía por costumbres ancestrales. A partir del año 1230, todos los Reyes, cuando firmaban algún documento, firmaban como Rey de León, Rey de Castilla y Rey de Toledo, respetando siempre la antigüedad de los Reinos. El dato más claro ocurrió el año 1348. En ese año se convocaron las Cortes de León y las Cortes de Castilla juntas por primera vez. Se reunieron en Alcalá de Henares. En esas Cortes se estableció un plan para el desarrollo jurídico vigente de las Siete Partidas. a este Ordenamiento se le llamó Ordenamiento de Alcalá. Fueron reconocidos todos los reinos, que eran cuatro. 1.º León que se componía de Galicia, Asturias, León y Extremadura 2.º Castilla que se componía de Castilla, el País Vasco y la actual provincia de Guadalajara. 3.º Toledo que se componía de la actual provincia de Toledo y la Meseta de la Mancha 4º Andalucía que se componía de las actuales provincias de Jaén, Córdoba, Sevilla y Murcia.

Jiménez Losantos, le ruego aporte usted en su programa algún documento irrefutable que demuestre que lo dicho por usted es verdad. Si no lo hace, pienso que usted cree que lo que escribió el falsario Rodrigo Jiménez de Rada es verdad; que lo que escribieron los cronistas medievales, incluídos los más famosos: Alfonso III el Magno, Sampiro, El Silense y El Tudense, es mentira, que las actas de las Cortes de Castilla son falsas y que el prestigioso historiador Menéndez Pidal miente.

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