Estrechar el cerco

A MENUDO cuando haces un viaje por carretera te encuentras con algún vehículo cuyo conductor parece que está entrenando para el próximo Gran Premio de Fórmula 1, sin importarle no encontrarse en un circuito y que los demás no estamos preparados para adelantamientos sorpresa ni que se nos pegue otro coche detrás sin que le veamos la matrícula. A veces alguno de estos Fangio nos da un buen susto y siempre lamentamos que no esté por allí cerca la Guardia Civil para bajarle los humos al prisillas. Lo cierto es que la Benemérita pone multas, pero desconozco el truco para que no las paguen y pasen de las penalizaciones de puntos. Ayer este periódico publicaba que la DGT tiene una lista con 5.000 conductores peligrosos, que han perdido ya más de 20 puntos del nuevo carné. Lo curioso es que esos delincuentes del volante pueden seguir dando sustos y provocar accidentes, mientras acumulan más multas y delitos. Uno de ellos podemos cruzárnoslo cualquier día, porque es de León y tiene nada menos que 20 denuncias de infracción por exceso de velocidad en carreteras de siete provincias, lo que le supone la pérdida de 75 puntos. Pero él -igual que el resto de los 4.999 conductores peligrosos de la lista de la DGT- sigue campando a sus anchas. Ahora Tráfico pretende sacarlos de verdad de las carreteras con una serie de medidas más duras, que pueden llegar a la retirada del carné durante año y medio. Creo que eso les dará igual. Lo único que entenderán será que se les quite el vehículo que conducen, aunque no sea de su propiedad (en este caso ya se las tendrán que entender con el dueño). A ver si al no tener coche ya no salen a las carreteras a competir con su sombra.