Maldición
¿ Se exige a sí mismo hacerlo todo muy bien y no equivocarse nunca? Cuando se propone algo, ¿se dice que tiene que salirle bien a la primera y que tiene que tener arreglado hasta el más mínimo detalle? Entonces es muy probable que sufra la maldición del ‘tengo que ser perfecto’. Si es así, notará que sólo se valora y se siente bien consigo mismo cuando lo hace perfecto. Que no se perdona ningún fallo o fracaso y siempre le está sacando defectos a todo. Que no lleva nada bien que las cosas no salgan como tenía previsto. Que es incapaz de distinguir lo que es superfluo de lo que de verdad es importante, y en ambos casos tiene que dar el máximo. Y que quiere tenerlo todo controlado, incluso lo que no depende de usted. Además le cuesta mucho valorar lo que hacen los demás porque cree que, igual que usted, no tienen derecho a cometer errores y que siempre podrían haberlo hecho mejor. ¿Le suena? Si se siente identificado, efectivamente el «se perfecto» le está limitando.
Cuando alguien se exige ser perfecto cree que si no lo es, si se equivoca o fracasa, pierde su valía como persona. Así que se dice que tiene que hacerlo todo perfecto, no equivocarse nunca y no fracasar, porque si no los demás también se van a dar cuenta de su falta de valía. ¿La consecuencia? Que así nunca llegará a disfrutar de lo que hace. ¿La solución? Lo primero es dejarse en paz a uno mismo y aceptar que no es perfecto, porque ningún ser humano lo es, ni falta que hace. Recordarse que es igual de valioso cuando comete errores y que se merece quererse incondicionalmente. Aceptar que tiene limitaciones, como todo el mundo, y que no puede llegar a todo. Empezar a darse permiso para cometer errores y aprender de ellos, reconocerse el esfuerzo por encima del resultado y fijarse mucho más en lo que va bien que en lo que no. Ocuparse de hacer razonablemente bien lo importante y despreocuparse de lo demás, que con que esté hecho ya es suficiente. Y, por supuesto, desterrar la palabra perfecto de su vocabulario, desde este momento. www.coachingtobe.es