Los casos de violencia infantil crecieron un 10% en un año

Las conductas violentas protagonizadas por menores de edad se han incrementado. Así se constata en el porcentaje de sentencias judiciales relacionadas con actos violentos, que ha subido un 10% el último año. En la mitad de los casos, el niño o adolescente precisa ayuda psiquiátrica, aunque su detección y diagnóstico quedan limitados por la ausencia de una especialidad de psiquiatría infantil. Son algunas de las conclusiones del Congreso Nacional de Psiquiatría, que reúne en Valladolid a 1.600 expertos. El profesor Josep Cornellá aseguró que el aumento de los casos de violencia entre menores se encuentra, en gran medida, asociado al núcleo familiar, aunque no existe un prototipo específico: «Por un lado, están las familias permisivas, con padres que permiten al niño crecer sin límites. En el lado contrario, se sitúan las familias protectoras, que acostumbran al niño a una especie de sociedad del bienestar, donde lo tiene todo y no necesita esforzarse por conseguir nada». En estas situaciones, «no se le educa para la frustración y cuando surge, el menor reproduce la dinámica que el pequeño ha visto en videojuegos o en la televisión, recurriendo a la violencia». Otra de las situaciones constatadas en el Congreso de Psiquiatría está relacionada con el consumo de alcohol y drogas, según la alarma expresada por Cornellá: «Yo he tenido en la consulta a niños de 11 y 12 años que han tenido sus primeras experiencias con alcohol y cannabis. Muchas veces los padres no lo saben o lo niegan. Estamos en una situación de cambio vertiginoso».