El ‘gordo’ lo traen los Reyes

El premio no se ha hecho esperar y a las 15.30 horas se cantó el ‘Gordo’. Sara Cabero Pérez, una bañezana estudiante de enfermería, es la nueva afortunada que dio el corte de oro. Confiesa Cabero que «fue después de comer cuando sacamos el roscón para amenizar el postre. No me lo podía creer, el primer corte que di al dulce dejó al descubierto la papeleta de los 3.000 euros, casi me desmayo».

Los Reyes Magos han dejado a esta bañezana de 22 años una buena propina, aunque en esta ocasión el zapato le ha cedido todo el protagonismo al roscón. Asegura la afortunada que es una fiel compradora del roscón de esta confitería bañezana, «incluso antes de que comenzarán a dar premios en metálico». Recuerda que desde pequeña iba con sus padres a por el dulce navideño, aunque en esta ocasión se invirtieron los papeles y fue ella la que invitó a su madre a acompañarla. «Sacamos el número sobre las 11.30 horas y antes de la una ya teníamos nuestros dos roscones, uno grande y otro mediano de crema», comenta la ganadora, quien señala que el último era el premiado, «el otro ya nos los habíamos comido la víspera de Reyes», bromea. «Me quedé parada, no podía reaccionar cuanto corté el primer trozo de dulce y todos en casa pensaron que estaba bromeando», asegura Cabero, a quien todavía se le escapa esa risa nerviosa de quien no se acaba de creer una buena noticia.

La ganadora del premio más cuantioso que han repartido estos confiteros aún desconoce qué hará con el dinero, aunque no descarta la posibilidad de viajar, sin embargo aún no ha elegido el destino. Baraja entre otras posibilidades la de darse algún capricho junto a su familia.

La confitería Conrado ha vendido este año más de 5.000 roscones, y el premio podía haber elegido cualquier destino. Pero lo cierto es que el azar ha querido que el dinero se quede en casa y que los dieciséis familiares que comían ayer en casa de los Cabero comenzarán el año esbozando una sonrisa de felicidad.