Prisión para un padre que pegó a su hijo por retrasarse al ir a buscarle

La Audiencia de Cantabria ha impuesto ocho meses de prisión a un padre que golpeó a su hijo de once años y le propinó patadas cuando estaba caído en el suelo porque se había retrasado cuando fue a recogerle a casa de la madre para cumplir con el régimen de visitas.

La Audiencia rechazó el recurso del padre y confirmó un fallo anterior del Juzgado de lo Penal número 3 de Santander. La sentencia explica que los hechos ocurrieron en enero del 2009, cuando el acusado, Tomás S.D., recogió a su hijo en el domicilio de la madre del menor, para pasar con el fin de semana en cumplimiento del régimen de visitas. El fallo explica que el chico se retrasó unos quince o veinte minutos, por lo que el acusado se enfadó con él y, al llegar a su domicilio, le reprendió por haberle hecho esperar.