Casi 2,7 millones de niños en España están en riesgo de pobreza y exclusión
Han aumentado en 800.000 desde el comienzo de la crisis económica y es el peor dato de la UE tras Rumanía.
Casi uno de cada tres niños españoles está en riesgo de pobreza, según denunciaron ayer varias organizaciones defensoras de los derechos humanos en Ginebra (Suiza). Rumanía encabeza la lista de la Unión Europea y España le va a la zaga. El indicador, sobre todo, señala una desigualdad que se dispara y pone en peligro el futuro de los menores. Y es uno de los puntos sobre los que, probablemente, se pondrá a prueba a España en un examen sobre derechos humanos que le hace hoy el resto del mundo.
«Casi 2,7 millones de niños padecen riesgo de pobreza o exclusión social, 800.000 más que en 2008», aseguró el Centro para los Derechos Económicos y Sociales, en un informe. «Es el equivalente a perder diez años de progresos en la lucha contra la pobreza infantil». El porcentaje de menores que se enfrentan a esta situación, denunció la organización, casi se ha doblado en 2007. «E incluso periodos breves de pobreza y malnutrición en los años críticos del desarrollo de un niño pueden tener consecuencias vitales sobre todo el espectro de sus derechos humanos».
Cada cuatro años, todos los estados miembros de Naciones Unidas deben someterse al Examen Periódico Universal. Una evaluación a la que lo someten el resto de países y en la que le pueden proponer sugerencias y planes para mejorar. En 2010 tuvo el primero y hoy se enfrenta al segundo. «En realidad, más que todo, es un mecanismo de presión», aseguró Ignacio Jovtis, investigador de Amnistía Internacional y participante en este proceso. Un representante del estado se reúne con una delegación de otros 40 o 50 que disponen de tres minutos para hacer sus sugerencias. Cada una, claro, cargada con una crítica. «Después cada estado debe decidir cuáles acepta, cuáles rechaza porque considera que ya cumple y cuáles asegura que estudiará», aclaró Jovtis. « Todo, siempre, a la luz de las recomendaciones anteriores». En los cuatro años desde el anterior examen a España, afirmó el investigador de Amnistía Internacional, han aumentado los capítulos sobre los que sugerir y criticar.