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Salamanca rebobina al 1936 de Unamuno
Amenábar rueda en la capital charra ‘Mientras dure la guerra’, con Karra Elejalde de rector de la Universidad .
Una escena de la película que Alejandro Amenábar rueda en Salamanca. DAVID ARRANZ
óscar r. ventana | salamanca
El centro histórico de Salamanca rebobinó ayer para situarse en el año 1936 por el rodaje de Mientras dure la guerra, el largometraje que en el que trabaja Alejandro Amenábar sobre la figura de Miguel de Unamuno para retratar con su mirada la agitación social y el estallido de la contienda.
A pesar de las limitaciones de acceso, los numerosos curiosos que han rondado por los lugares de rodaje han podido observar de refilón a un caracterizado Karra Elejalde, que da vida a un envejecido Unamuno, envuelto del ropaje negro habitual del rector por aquel entonces. Coches de la época y numerosos soldados han dado a las escenas el ambiente bélico que impregna la película, de una temática hasta ahora no tratada por Amenábar, quien vuelve a rodar en castellano después de su celebrada Mar adentro, con la que se hizo con el Oscar a la Mejor Película Extranjera en 2005.
En esta ocasión, el cineasta se adentra en una historia de cambios de opinión, de arrepentimiento y de búsqueda de la justicia en medio de un ambiente crispado por el alzamiento militar contra la República, que inicialmente apoya Unamuno, para posteriormente reprochar a sus impulsores su deriva sangrienta y el encarcelamiento de algunos de sus compañeros de la Universidad. «Este proyecto es muy especial para mí al tratarse del primero que ruedo en lengua española después de mucho tiempo», ha reconocido Amenábar en un comunicado distribuido por la productora, en el que plantea además que «pese a retratar el pasado reciente de España, habla muy directamente sobre su presente».
El rodaje, que se extenderá en Salamanca hasta el 8 de junio, ha cambiado el aspecto de la Plaza Mayor, al recuperar los jardines que albergó en el pasado, y algunas de las calles más frecuentadas del centro histórico, que han vivido el mayor trasiego de actores y técnicos.
Lo que apenas requerirá retoques es el Paraninfo de la Universidad de Salamanca, que mantiene intacta su esencia histórica, y que servirá de escenario para uno de los momentos que se prevén culminantes de la película: el enfrentamiento dialéctico entre Unamuno y el fundador de la Legión, Millán Astray, encarnado por el barcelonés Eduard Fernández.