Terapia sobre dos ruedas sin límites
Moteros solidarios de León es una asociación que proporciona experiencias multisensoriales a personas con discapacidad. Desarrolla su actividad en León, Asturias, Lugo, Palencia y Burgos..
Un chico con discapacidad disfruta de la última actividad de Moteros Solidarios
Experimentar el movimiento sobre dos ruedas, el contacto físico y sentir el aire en la cara es un lujo reservado a unos pocos privilegiados. Entre ellos no están las personas con capacidades especiales, por eso, desde la Asociación moteros solidarios de León ayudan a su integración con la organización de paseos en moto a poca velocidad.
Ramón Carro es el presidente de una asociación que «se constituyó formalmente en 2007, aunque comenzamos a realizar actividades desde dos años y medio antes y, visto el desarrollo y la aceptación que tenía la mototerapia, decidí darle forma jurídica contando con el apoyo de todos mis compañeros», afirma.
La idea surgió de una forma espontánea. Ramón Carro, ideólogo y promotor de Moteros Solidarios cuenta que «un día me encontraba esperando para hacer una ruta motorista con un grupo de compañeros y pasaba por la acera una señora acompañando a un niño con síndrome de Down que se quedó mirando atentamente la moto. Le dije a la señora si quería que lo subiera y me respondió que sí. Lo subí en la moto, la arranqué y el problema fue bajarlo, porque el pequeño no quería de ninguna forma. Aquello me impactó, le prometí que le iba a dar una vuelta subido en la moto y, a raíz del hecho, le comenté a mis compañeros que podíamos realizar actividades con las motos para los discapacitados. Me miraron con cara de sorpresa, me dijeron que si estaba loco». A partir de ahí, su historial solidario no ha hecho más que aumentar.
Con la ayuda de la junta vecinal de Navatejera organizaron el primer paseo en moto con personas de diferentes discapacidades en un circuito cerrado. Tres meses más tarde organizaban su segundo paseo y tras ver el éxito conseguido Ramón decide institucionalizar la asociación, dotarla de una identidad visual con logo y marca registrada en la comunidad económica europea y de un reglamento interno para los socios.
Actividades al aire libre
La temporada de actividades al aire libre de la asociación empieza, en palabras de su presidente, «cuando la climatología lo permite». En un año normal se desarrolla durante los meses de marzo a noviembre, pero el calendario se retrasó debido a las lluvias en la provincia y hasta el mes de mayo no salieron a rodar con las personas discapacitadas.
Las entidades que requieren de sus servicios cada vez son más, según Ramón Carro esto se debe «a los beneficios que tiene para las personas con capacidades diferentes supone «semanas antes de que nosotros lleguemos estén los chicos entusiasmados, el día que de la actividad la euforia es máxima y la semanas siguientes recuerdan cada detalle de lo vivido». Para ellos es una forma de desconectar de su rutina y de hacer algo que les emociona.
Ramón Carro, dirige una asociación que forman cerca de 60 socios y explica que «ha sido y es de las cosas de la vida que más satisfacciones nos da y más nos llena, viendo la felicidad que le produce a estos chicos,».
Todas estas actividades en motocicleta se denominan mototerapia, porque según el presidente de la asociación «tiene beneficios para las personas con discapacidad como son la integración, mejoras en su psicomotricidad y en las relacionales personales o el disfrute al percibir la sensación de libertad que proporcionan las motos». Tales son los beneficios de esta actividad para las personas discapacitadas que ya se ha escrito una tesina sobre ello en la Universidad de León y 6.000 personas se han beneficiado de esta terapia, según Ramón Carro.
Más allá de León
Durante el mes de agosto las entidades tutelares de personas con discapacidad y los centros que tienen alumnos a su cargo tienen convivencia con la familia, lo que sumado a las vacaciones de los propios integrantes de Moteros Solidarios hace que la actividad se suspenda. Este año, la última salida con las motos fue en Burgos. Porque sí, el éxito de los moteros traspasa la frontera de la provincia de León.
El primer fin de semana de julio en la localidad de Pampliega los moteros leoneses tenían una cita con la asociación de padres y tutores del centro ocupacional el Cid (Apacid). En un trayecto de cuatro kilómetros, entre dicha localidad y Villazopeque las personas con discapacidad disfrutaron del día compartiendo historias en torno a una gran paella a la que invitaron a los moteros de León.
Además de Burgos, la asociación tiene un calendario en Asturias, Lugo, Palencia y en León. Colabora con asociaciones como Cosamai, Apacid, Amidown, Asprona, Hijas de la caridad en Lugo, Aspanis y Aspace o Nuestra Señora del Valle en La Bañeza. Sus compromisos son múltiples y reciben más, pero, en palabras de Ramón Carro «nos es imposible atenderlos, deberíamos dedicarnos solo a esto y nosotros tenemos nuestro propio trabajo».
El éxito es una conjunción de varios factores que según el presidente de Moteros solidarios se engloban en que «una moto es llamativa para los discapacitados, en la experiencia propia tras muchos años realizando estas actividades y el poder que tiene compartir un día diferente con otras personas».
El futuro de la asociación según confirma Ramón Carro «estamos para atender a las personas discapacitadas sin límites». Además, la asociación incorpora dos nuevos socios este año pero «el proceso de entrada es muy riguroso, debe venir avalado por un socio actual y durante sus dos primeras salidas ayudará a montar en las motocicletas a los discapacitados, después ya puede llevar discapacitados en su moto durante las salidas» asegura Ramón Carro.