Vuelta al cole... y a los virus

Después de un verano al aire libre, vacaciones y descanso, el inicio del curso escolar llega no solo con una cuenta de gasto para las familias sino con la mochila cargada de virus e infecciones. A partir del día 16 de septiembre, junto una semana después del inicio del curso escolar para el segundo ciclo de Educación Infantil, y Primaria, las peticiones de consulta con el pediatra se incrementan en un 30%, según los datos facilitados a este periódico en la Gerencia de Atención Primaria de León. Los menores llegan a las consultas con fiebre, tos, problemas respiratorios y problemas estomacales. «La media diaria de visitas a las consultas por día es de 30 niños, cuando pase una semana del inicio del curso escolar atenderemos a una media de ocho menores más», asegura la pediatra del Centro de Salud de Eras de Renueva, Silvia Rodríguez Blanco. La pediatra asegura que pese al repunte de consultas que se esperan en los días siguientes al comienzo de las clases, el mayor pico de demanda asistencial periátrica está en los meses de enero y febrero, con la llegada de la gripe.» Entonces el incremento de niños es del 50%».

Toses, fiebres, mocos, manchas en la piel, diarreas... «cuanto más pequeños, más casos vemos porque empiezan en la guardería». Son, según la pediatra, «dos años vitales en la vida».  

Los pediatras saben que el sistema inmunológico de todos los menores no sigue un patrón común a una misma edad. «Entre los factores para que los niños y niñas se contagien más están el nivel socioeconómico de las familias, no recibir lactancia materna, haber nacido prematuro o padres fumadores». Una casa con humo aumenta en los menores las infecciones respiratorias.  

«Es inevitable que cuando empieza el curso escolar, sobre todo en las guarderías, con una media de quince niños por aula, compartan juguetes e incluso chupetes que se pasan entre ellos. Aunque los profesores están atentos y les lavan las manos, siempre hay contagios por sus relaciones».  

LOS PIOJOS  

Un visitante molesto. «Dentro de unos días empezarán a llegar a las casas las notas de los profesores porque las cabezas de los alumnos se llenan de piojos», destaca la pediatra. Entre el 5 y el 14 % de los niños y niñas en edad escolar ha tenido piojos alguna vez, según los datos del Ministerio de Sanidad. Sin embargo, no es una infestación que llegue a las consultas del pediatra. «Acuden a las farmacias. A los pediatras no nos consultan quizás por vergüenza. A veces vemos liendres en el pelo, pero no es corriente que nos consulten por eso».  

La «vergüenza» a la que se refiere la pediatra está motivada por la creencia «falsa» de que los piojos van al pelo sucio. «En realidad no tiene nada que ver con que el niño esté sucio. Le puede tocar a cualquiera».  

El síntoma más claro de la presencia de piojos es el picor o prurito del cuero cabelludo.  

Lo primero que hay que hacer cuando se detectan piojos es avisar al centro escolar para evitar que el parásito se propague a otros compañeros del aula. Los expertos insisten en que la vergüenza no está justificada y es importante alertar para parar la infestación masiva en el centro.  

Para prevenir y detectar a tiempo el contagio, es importante vigilar el cabello de los niños una vez a la semana, sobre todo cuando el colegio comunique un brote. «Hay que multiplicar la atención con las niñas, no porque suelan llevar el cabello más largo, sino proque tienden a juegos en los que están más juntas y porque comparten más objetos como horquillas, coleteros y peines», alertan los especialsitas de Cinfa en un comunicado «Hay menores que por su composición sanguínea tienen más predisposición a tener piojos, independientemente de su género».  

SIN CASOS DE SARAMPIÓN  

Los pediatras no ven casos de sarampión en las consultas de León. «Para mí sería una rareza», explica Silvia Rodríguez, que ejerce de pediatra desde que acabó la especialidad en el año 2007. «Creo que no sabría diagnosticarlo porque nunca he visto ninguno. Si se diera el caso lo enviaría directamente al hospital y lo notificaría a Sanidad».  

Ante el aumento de los brotes de esta enfermedad en Europa, el Ministerio de Sanidad aconseja a los nacidos después de 1970 que acudan a vacunarse si no están inmunizados. «Ante la duda», dice la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, María Luisa Carcedo, «se recomienda acudir al centro de salud, para consultar su historial con el médico de cabecera. La Organización Mundial de la Salud ha certificado un año más que España es un país libre de sarampión endémico», recordó Carcedo este martes en un acto celebrado en Madrid.  

El Ministerio de Sanidad aprobó en julio un calendario de vacunación acelerada, al que ha remitido Carcedo frente al brote de sarampión. «Se recomienda la vacunación en personas nacidas en España a partir de 1970 sin historia de vacunación documentada y en personas no nacidas en España y sin documentación de vacunación previa», mantiene el plan ya aprobado por la Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, y que incluye otras enfermedades contagiosas.  

Ante la duda de haber sido vacunado hay que acudir al médico de cabecera, mantiene Carcedo. Los expertos del ministerio recuerdan que no importa si alguien ya ha sido vacunado. Puede recibir otra dosis.