LA COCINA DE SIEMPRE

Comida casera, la de toda la vida. Esa es la esencia de Venta de Getino-Casa Amador, un lugar con alma, cargado de tradición que tiene a la cocina de siempre, la que se hace a fuego lento, como seña de identidad.

Al frente de este negocio, ubicado en el pueblo del mismo nombre, están Mirta Sánchez y su hijo Carlos. Juntos, dan vida a la cuarta generación de una empresa familiar que fundaron hace más de cien años Dona y Amador, los suegros de Mirta. Sus platos rezuman buen gusto y evocan a quien los saborea a la cocina de la abuela. Patatas con carne, garbanzos con langostinos, fabada, patatas a la importancia o paella son algunos de los primeros patos que se pueden degustar aquí. De segundo, rabo de toro, cordero asado, cecina de chivo, carne guisada, trucha o bacalao que harán las delicias de quien se siente a la mesa en la Venta de Getino-Casa Amador, una de las pocas que ya quedan en la provincia.

Los postres, al igual que el resto de la carta, son de elaboración casera y, además, realizan comidas por encargo para quienes quieran algo más especial. Tocinillo de cielo, tarta de queso, mousse de limón, flan o tartas especiales de la casa pueden dar el toque final a una buena velada gastronómica.

Desde las diez de la mañana y hasta la medianoche, salvo los lunes por la tarde, abre sus puertas la Venta de Getino-Casa Amador para ofrecer comidas y cenas y también menús para el que lo desee.

Entre sus especialidades destaca la tortilla de patata, el cordero asado o los entremeses. Platos tradicionales que dicen mucho si la materia prima es buena y, además, las recetas se elaboran con cariño, como es el caso.

El maravilloso entorno en el que se encuentra la Venta de Getino-Casa Amador, con frondosa naturaleza y hasta caldas de aguas termales. es otro aliciente más para visitarlos. ¿Otro motivo? la feria de Cármenes, el próximo 13 de octubre.