León no logra bajar las muertes por cáncer en los últimos diez años
La causa principal de decesos son los problemas circulatorios, según el INE
Tratamientos contra el cáncer en el Hospital de León.
El avance de los tratamientos y las técnicas diagnósticas no parecen frenar en León el número de fallecimientos provocados por el cáncer desde hace diez años. Según los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en la provincia de León fallecieron el año pasado 1.638 personas, casi exactamente las mismas que murieron por esta causa en el año 2010, con 1.645 fallecimientos. El cuenteno no varía casi desde hace diez años. Los tumores de tráquea, bronquios y de pulmón son los que peor pronóstico presentan y causan 280 muertes, seguidos del cáncer de colon, con 172 y el de mama con 102.
El cáncer es la segunda causa de muerte de los leoneses. En primer puesto de los decesos los provocan los problemas del sistema circulatorio, que causaron 1.740 fallecimientos. Los problemas respiratorios causaron 890 muertes en León el año pasado.
En la provincia murieron el año pasado 6.309 personas, 516 más que el año anterior.
Según las estadísticas del INE, baja el número de personas que deciden quitarse la vida. El año pasado se suicidaron en la provincia de León 24 personas, once menos que en 2017.
La mitad de las muertes en España en 2018 las causaron las enfermedades del sistema circulatorio (primera causa de muerte en mujeres) y por tumores (principal motivo en hombres), según la última estadística del INE, que recoge un descenso de los suicidios en un 3,8 %.
Según la estadística Defunciones según la causa de muerte en 2018 se produjeron en España 427.721 defunciones, 3.198 más que en el año anterior (un 0,8 % más).
Por sexo, fallecieron 216.442 hombres (un 1 % más que en 2017) y 211.279 mujeres (aumentaron el 0,5 %).
El suicidio se mantuvo como la primera causa de muerte externa, con 3.539 fallecimientos, un 3,8 % menos que en 2017; seguido de las caídas accidentales (con 3.143 muertes y un aumento del 2,8 %), el ahogamiento, sumersión y sofocación (con 3.090 y un descenso del 0,8 %) y los accidentes de tráfico (1.896 personas, un 2,4 % menos).
Castilla y León registró 29.297 muertes en 2018, lo que la sitúa como la segunda comunidad autónoma con la mayor tasa bruta de fallecimientos por cada 100.000 habitantes tras Asturias, 1.215,5 frente a 1.292,5 del Principado
En cuanto a las causas de las mismas, Castilla y León presenta la tercera tasa bruta de mortalidad más alta por enfermedades del sistema circulatorio (341,8 fallecidos por cada 100.000 habitantes), tras Asturias (379) y Galicia (357,6), y la segunda en cuanto a muertes por cáncer (322,9), también tras Asturias (355,5). Las enfermedades del sistema circulatorio fueron la tercera causa de muerte en todas las comunidades.
En el conjunto de comunidades, en Andalucía se produjeron 72.806 muertes; en Aragón 14.100; en Asturias 13.238; en Baleares 8.206; en Canarias 16.310; en Cantabria 6.096; en Castilla y León 29.297; en Castilla-La Mancha 19.574; en Cataluña 66.562; en la Comunidad Valenciana 45.330; en Extremadura 11.451; en Galicia 32.419; en Madrid 46.599; en Murcia 11.327; en Navarra 5.819; en País Vasco 21.763; en La Rioja 3.205; en Ceuta 535; y en Melilla 516.
El informe evidencia que entre la población menor de un año, ocho de cada diez muertes se debieron a afecciones perinatales (57,9) y a malformaciones congénitas (22 %), aunque el 1,2 % de las muertes en esta población se debieron a tumores.