León, colaborador de la FAO en el Día de la Alimentación
El Ayuntamiento de León ha sido designado por la FAO como ‘Amigo’, al ser designado colaborador en el Día Mundial de la Alimentación, por su contribución a la campaña mundial de promoción y sensibilización de los problemas mundiales, informa el Consistorio en un comunicado.
El lema elegido este año es No dejar a nadie atrás y figurará en la cartelería, redes sociales y documentación que se desplegará para celebrare este Día Mundial.
Según destaca la FAO en su comunicación, «cada año colaboramos con un número superior de organizaciones, empresas y personalidades para hacer del Día Mundial de la Alimentación la campaña mundial que es».
«Los amigos del Día Mundial de la Alimentación nos apoyan ofreciendo sus plataformas para sensibilizar sobre problemas mundiales importantes. Llegar a una amplia audiencia mundial es clave para respaldar los esfuerzos para acabar con el hambre y alentar al público a elegir un estilo de vida más saludable y sostenible», recoge la notificación de la FAO.
Como forma de colaboración, el Ayuntamiento de León publicitará la campaña mundial en los postes de información pública en el mobiliario urbano en los que ya están instalada la cartelería oficial, asimismo se darán a conocer los lemas y actuaciones de este Día Mundial, que se conmemora el día 16 de octubre.
También se iluminará de azul la sede municipal de la plaza de San Marcelo que se convertirá así en el primer edificio municipal español que participa en estas actividades; además difundirá por sus redes sociales esta campaña mundial.
La FAO advierte que aunque el mundo avanza hay personas que no tienen acceso al desarrollo humano, la innovación o el crecimiento económico.
«De hecho, millones de personas en todo el mundo no pueden permitirse una alimentación sana, lo que las pone en alto riesgo de inseguridad alimentaria y malnutrición. Pero para poner fin al hambre no se trata solo del suministro. Hoy en día se producen alimentos suficientes para nutrir a todos en el planeta. El problema radica en el acceso y la disponibilidad que se ven cada vez más obstaculizados por numerosos desafíos, como la pandemia de covid-19 los conflictos, el cambio climático, la desigualdad, la subida de precios y las tensiones internacionales. Personas de todo el mundo están sufriendo el efecto dominó de unos desafíos que no conocen fronteras».