Edificio Banco de Vizcaya

L eón, septiembre de 1969. Julián Larrea Basterra, prestigioso y gran arquitecto bilbaíno colegiado en 1957, firmó, con Jesús Arroyo Quiñones, este edificio de oficinas para el Banco de Vizcaya en un céntrico solar de esquina en Ordoño II c/v a Independencia, frente a la plaza de Santo Domingo, cuyas obras dirigieron con Antonio Miguélez como aparejador. Julián Larrea elaboró el proyectó separando las oficinas bancarias del resto del inmueble. Encajó dichas oficinas en dos sótanos, el segundo para instalaciones y el primero para cajas de alquiler, caja fuerte, archivo general y otros servicios. La planta baja accesible por Ordoño para el público, la Subdirección, atención al cliente, y una colorista escalera circular conectando el sótano con la planta primera, donde emplazó la Dirección, Secretaría, Sala de juntas y demás negociados. Y por Independencia, el acceso al resto del inmueble con dos ascensores y escalera para subir a siete plantas de oficinas, la última retranqueada. Larrea trazó las fachadas tripartitas. La de Ordoño en diente de sierra revelando la falsa escuadra del solar. En la base, escaparates comerciales y accesos. El cuerpo principal sobre una banda opaca, chapado de granito Rosa Porriño y estructurado por machones entre muros cortina de aluminio con doble división en cada planta: una banda trasparente y otra opaca revestida por piezas escultóricas seriadas del gran José Luis Sánchez. En la esquina, un esbelto prisma de caras lisas. Y como remate, petos ciegos y volados en las azoteas del ático… En la Memoria del Proyecto, Larrea nos explicaba que, dado el carácter comercial del inmueble, había buscado «la simplicidad de líneas sin elementos especiales, y la unidad del conjunto para potenciar su singularidad», utilizando «materiales de primera calidad con una modulación moderada, para que el inmueble fuera digno de su emplazamiento y finalidad… tratando de no abarrocar»… ¡La forma, la función y el uso racional de los materiales!... Y otra buena muestra de Funcionalismo Racionalista en la arquitectura institucional de los años 60.