El caudal del Ebro aumenta y desciende el de sus afluentes

El caudal del río Jalón y de los otros afluentes que se desbordaron en los últimos días remitió ayer, aunque el volumen del Ebro continúa en alza a su paso por la provincia de Zaragoza, en cuya capital se espera para hoy la punta de la crecida. Hasta que el caudal del Ebro se sitúe en niveles de normalidad, el Centro de Coordinación de Operaciones de Aragón (Cecop) mantendrá la situación de emergencia, como medida preventiva durante todo el fin de semana. Mientras en Zaragoza el caudal del Ebro asciende, la situación de sus afluentes, Manubles e Isuela, en su margen derecha, y Gállego, Guatizalema, Alcanadre y Cinca, en la margen izquierda, se ha normalizado tras inundar durante los últimos días, en algunos lugares, infraestructuras y campos de cultivo. Las zonas afectadas del Valle del Manubles fueron visitadas ayer por el consejero de Agricultura del Gobierno aragonés, Gonzalo Arguilé, quien calificó de «desastre» los daños provocados por la riada y anunció que se van a aplicar las mismas ayudas de emergencia que se habilitaron para los afectados por la crecida del río Ebro. Además, el río Jalón que ayer amenazó a la localidad de Pleitas (Zaragoza), de 55 habitantes, registró ayer su máxima avenida en Grisén (Zaragoza) a las 11:15 horas, con una altura de 3,15 metros y un caudal de 115 metros cúbicos por segundo, y posteriormente comenzó a aportar sus aguas al Ebro.