Boda al estilo Hollywood

La boda de Russell Crowe con la cantante Danielle Spencer, celebrada ayer con los últimos rayos de sol en la capilla familiar de la hacienda australiana del actor, tuvo un sabor romántico y tradicional similar al de los filmes de Hollywood. El hombre que una vez le dijo a la actriz Meg Ryan que prefería pasar más tiempo con sus vacas que con ella explicó que optó por casarse en una ceremonia religiosa, en la capilla familiar de su hacienda en Nana Glen, a quinientos kilómetros al norte de Sydney, por complacer a sus padres. «Mi madre (Jocelyn) lo ha soñado desde que yo tenía 16 años», remarcó el otrora indomable soltero al referirse a las celebraciones nupciales que le han costado casi un millón de dólares (unos 932.000 euros). Con un vestido crema y velo blanco, creación de Giorgio Armani, llegó Spencer «como una princesa», según describieron algunos admiradores que se congregaron en las inmediaciones de la propiedad rural del actor. La novia, como es tradición, llegó junto a su padre, el presentador de televisión Don Spencer, en una limusina negra rodeada de tres motocicletas Harley Davidson, maquinas que han apasionado al fornido «gladiador». Diseño de Armani Pese a que siempre se declaró un hombre sencillo, Crowe vistió un traje de 40.000 dólares (unos 37.300 euros) que incluía un bordado del escudo de su familia, diseñado y entregado personalmente por Armani. Los testigos del novio, cuya boda coincidió con su trigésimo noveno cumpleaños, fueron el actor Robert Mammone, el empresario Mark Drumbell y el periodista británico Martin Palmer, mientras que el ramillete de damas estuvo compuesto por amigas íntimas de Spencer. La sobrina de Crowe, Chelsea, fue la encargada de portar las alianzas de Cartier que llevarán los recién casados «hasta que la muerte los separe». Entre los ochenta asistentes estuvieron el director Ridley Scott, que dirigió hace tres años a Crowe en «Gladiator» -película que le procuró al intérprete un Oscar-; el gobernador del estado norteamericano de Texas, Rick Perry, y su esposa, Anita, y varios jugadores de cricket australianos y neozelandeses, incluidos los primos del actor. Las celebraciones, que se iniciaron el pasado fin de semana, culminaron con una gran fiesta que tenía previsto durar hasta avanzada la madrugada y que sería animada por la banda Thirty Odd Foot of Grunt -que lidera el actor- y la Orquesta de Cámara de Australia. Se cree que la pareja no se irá de luna de miel hasta por lo menos finales de abril y que se mudarán inmediatamente a la lujosa mansión comprada recientemente por Crowe cerca de la bahía de Sydney, aunque también pasarán varias temporadas en la hacienda de Nana Glen. La prensa del corazón ya se ha adelantado a pronosticar que Crowe y Spencer intentarán tener hijos lo antes posible tras celebrar, aparentemente, un ritual aborigen para la fertilidad, denominado «Burnum Burnum».