Oxfam pide estrategias a largo plazo para acabar con el hambre

La organización internacional de asistencia Oxfam pidió ayer más acción y un nuevo enfoque en la ayuda que se presta a Africa, así como el refuerzo de las políticas para atajar de raíz los problemas que causan el hambre y la miseria. La recomendación está recogida en un informe de Oxfam dado a conocer ayer en Sudáfrica, en el que reconoce que, aunque la ayuda alimentaria puede ser apropiada en algunas situaciones, «con frecuencia llega muy tarde, es muy costosa y está muy politizada». «El ciclo de desastres y de inseguridad alimentaria en partes de Africa sólo puede romperse si el mundo se enfoca en las causas de esta crisis», sostiene la directora de Oxfam, Barbara Stocking. «Aunque el gasto en ayuda humanitaria está aumentando -añade-, los países donantes y los gobiernos no están apoyando estrategias a largo plazo que puedan ayudar auténticamente a los pobres de Africa». Los datos que incluye el informe indican que la población que en Africa subsahariana vive con menos de un dólar diaria se ha duplicado entre 1981 y el 2001. Ahora son 313 millones de personas, o el 46 por ciento de la población. Aunque la asistencia humanitaria a Africa se ha triplicado desde 1997 hasta el 2003, hasta alcanzar los 3.000 millones de dólares, la ayuda para proyectos agrícolas se ha reducido en casi la mitad entre 1990-92 y 2000-02, hasta llegar a los 974 millones de dólares. Oxfam sostiene que la mayoría de los alimentos que se distribuyen para los países africanos que pasan hambre es importado, «lo que significa que puede tardar cinco meses en llegar y cuesta hasta un 50% más que se comprara localmente». «Le costaría al mundo mucho menos realizar grandes inversiones para cortar de raíz las causas del hambre que continuar con el ciclo actual de demasiado poco y demasiado tarde, lo que ha sido la realidad de la asistencia contra el hambre en Africa por cerca de medio siglo», insiste Stocking.